Un bosque en China ha crecido a 192 metros debajo del río. Y aún no sabemos muy bien cómo


Una expedición espeleológica ha hecho recientemente una curiosidad sobre una alucinación: una gran pista de aterrizaje que se almacena en el interior de un bosque, así como la sucursal china de Xinhua. Si en este momento este bosque vive en esta situación de deconstrucción de su entorno, entonces se brindará un idono tanto para la ciencia geológica como para el estudio de la fauna y la flora.


El descubrimiento. La expedición descendió al valle el 6 de mayo y atravesó buena parte de la tierra cuando el área retrocedió a la superficie el mismo día. El equipo liderado por Chen Lixin, quien nos dejó explorando muñecos y cuevas de la zona. El cubo se encuentra en la región autónoma de Guangxi, al sur de China, más concretamente en la provincia de Leye.

El lugar de encuentro de los exploradores. La dolina tiene tres accesos a las cevas, aparentemente pertenecientes a un sistema de cuevas distinto al del repollo que se encontraba en el suelo antes del hundirse y creó la dolina. Así lo explicó Zhang Yuanhai, del Instituto de Geología Karst relacionado con el Servicio Geológico de China, en la nota de la agencia daba de la sala.

La dolina tiende a una profundidad de 192 metros, una longitud de 306 my 150 ma ancho. Los expedicionarios también saben por el bosque que encontrarán en el lugar, con troncos de 40 metros de altura y una densa vegetación que la canción de cuna «tiene los hombres» de una persona.

Una región idonia para la aparición de muñecas.
En mandarín, el número que representa estas tamañas es «tiankeng», que se puede traducir como «agua celestial». Guangxi es una propuesta de zona para la aparición de estos compañeros naturales agraciados en su terreno Kárstico. Esta propiedad fue registrada en 2007 como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Las zonas kársticas están destinadas a la aparición de sistemas de cubetas, pero debido a la variedad de circuitos ambientales los paisajes pueden variar mucho. Lo explica el experto en cuevas George Veni, director ejecutivo del National Cave and Karst Research Institute (NCKRI) estadounidense, en el portal Science Alert. Se cree que las dolinas siempre están presentes en estas trampas geológicas.

La Gran Dolina.
La Península Ibérica cuenta con una importante región de superficie kárstica. Se expande en los dos terraplenes del río Ebro, en diversas zonas del sistema ibérico hasta la alta montaña. Seguramente la dolina más conocida aquí se encuentra en la provincia de Burgos, en el yacimiento arqueológico de Atapuerca, también declarado Patrimonio Humanitario de la UNESCO. La Gran Dolina es también un lugar de gran interés, no tanto geológico como antropológico.

Biodiversidad. En la novela de Arthur Conan Doyle, El Mundo Perdidoun equipo de investigadores ascendió a un meteorito a bordo de un río tropical, muy cerca de las teteras amazónicas, para descubrir que, en lo que respecta al resto del mundo, ha conservado un hábito peculiar: en su soberanía los dinosaurios.

Sin mirar los límites de la ciencia ficción, el equipo de descriptores de este accidente geográfico (una especie de medida invertida) especula que puede representar un ecosistema joya. La parte islámica del resto del bosque y sus particulares condiciones microclimáticas pueden ser favorables para la aparición de especies que no se encuentran en otros lugares del mundo.

Imagen: Patricio Xu



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