Si los fabricantes de enchufes quieren sovereivir tienen que convertir a empresas mineras. Stellantis lo sabe bien


El futuro del sector de la automatización pasa por la minería. Con los fabricantes en plena transición, entre los vehículos de combustión y los eléctricos, y Bruselas decidida a acabar con la comercialización de las cocinas de gasolina y gasóleo para 2035, las grandes empresas se encuentran ante un grave problema que hay que solucionar: la fabricación de baterías suficientes.

Hace falta mas. Mucho más. No sorprende a nadie que la industria no esté cumpliendo su promesa; pero significa que el tiempo se acaba y ganan terreno los mercados de la UE o los autónomos de las corporaciones. Lo más poderoso es que los fabricantes de automóviles están desgastando el casco, golpeando la pica y doblando un poco las minas.

Suena a locura, pero ya hay quien lo esta haciendo.

El año pasado, por ejemplo, Stellantis. El último ejemplo es el de Stellantis. La compañía europea ha desvelado 50 millones de euros para convertirse en el segundo mayor accionista de Vulcan Energy, una empresa de origen australiano y alemán que tiene previsto explotar las reservas del valle del Alto Rin Valley. Además de la participación del 8% en la compañía, Stellantis amplía el acuerdo de suministro de metal de precisión, fundamentalmente para la fabricación de baterías.

“Hacer esta inversión estratégica en un líder en la extracción de litio nos ayudará a crear una cadena de valor resistente y sostenible para nuestra producción europea”, dijo Carlos Tavares, director ejecutivo del grupo. Si quiere centrarse en centrarse en los vehículos eléctricos en los finales de esta década, los principios de proximidad, Stellantis necesitará producir 150 GWh en baterías para 2030. Por lo tanto, plante plantas de baterías cerca de la proximidad.

Un paso cojo como una pequeña sorpresa. Si es así, el hecho de que un fabricante de cocinas se adhiera a la mina de litio puede resultar en una laminación, pero tiene poca o ninguna sorpresa. Stellantis no es el primer paso en esta dirección. Además, en finales de 2021 se ha anunciado lo mismo y hay un acuerdo con Vulcan Energy para asegurar la suma de entre 81.000 y 99.000 toneladas de hidróxido de litio para 2026. Con su nuevo movimiento de unas cuantas más.

Otro gigante de la automatización automotriz, Tesla, también planea construir un automóvil de litio para garantizar que no falle el material valvular. En 2020 Elon Musk anunció que la empresa había adquirido un terreno de 4.050 acres en Nevada para extraer metales y construir una refinería de litio, en 2021 patentó un sistema de selección y realizó solo un mes de la misma idea. a través de Twitter: si los precios no se bajaban, Tesla se dedica a minar directamente.

Y no son los únicos. Desde luego que no. Ni Stellantis ni Tesla son raras avis ni su miedo a la escasez de litio y elza de los precios es una excentricidad. En la final de 2021 Volkswagen también ha movido ficha para convertirse en uno de los compradores prioritarios de Vulcan Energy para 2026, General Motors ha apostado por impulsar litio en California y BMW tiene alguna similar en Argentina.

La preocupación no es nueva. En 2018 otro gigante del sector y con clara apuesta por los motores de hidrógeno, Toyota, invierte en torno a 190 millones de euros para realizar una participación comprometida en una empresa minera especializada en la extracción de… Exacto, litio.

Objetivo: Suministro seguro … y sin intermediarios. El objetivo de la industria es claro: garantizar la cumbre de la liturgia y hacer la presidencia de los intermediarios. Motivos de diez para pedir. Cómo lamentaba el pilar Musk En febrero ha desaparecido la cotización del litio de la larga de los últimos años, un derivado del alza con incrementos tremendamente pronunciados. Quien quiera comprar litio el pasado día pagará cinco veces más que en el mismo mes de 2021.

Aunque es probable que aumente la implantación de vehículos eléctricos en Europa a nivel mundial, la demanda de nuevas minas siempre será un proceso lento y rápido. Buen ejemplifica el tenemos en los carreteles que se desesperan del proyecto de explotar un yacimiento en Extremadura por el medio impacto. Su peso en Europa es la clave.

Y como resultado final, los problemas de la cumbre. Como resultado, el sector automotriz se encuentra en problemas con los metales y la industria metalúrgica como minerales raros, críticos y valiosos para la fabricación de vehículos eléctricos.

La propuesta de la UE ha conciliado que para 2030 habrá 18 semanas más y cinco cobalto más de lo que llevamos con la cumbre actual; la necesidad será superior a los mediadores de vela. Esta necesidad es la suma de las cláusulas clave: la dependencia de la UE, que requiere la importación de materiales de cobalto, los animales raros de África o Asia; además de su elevado costo.

Imagen de portada | Coordinación General de Observación Terra / INPE (Flickr)



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