Quise comprar bitcoins en Coinbase y mi banco me bloqueó la transferencia: qué hay detrás de los problemas comprando criptomonedas

Si eres usuario de Coinbase, una de las plataformas de inversión en criptomonedas más populares, quizás te hayas encontrado con este problema. Quieres transferir dinero desde tu cuenta bancaria para invertir en Bitcoin o en Ethereum tal vez, rellenas los datos y pulsas el botón «enviar». Sin embargo, tu banco bloquea el movimiento, no puedes ingresarlo. Lo registra como una actividad de alto riesgo, como un movimiento inseguro. O bien no te deja completar la transferencia, o bien te pide algún paso extra de seguridad, como una llamada telefónica a sus oficinas.


¿Por qué un banco no bloquea ni pide verificaciones de seguridad más allá de las obvias —como los SMS con un código de validación—, pero sí lo hace cuando queremos destinar dinero a nuestra cuenta de Coinbase? El motivo tiene que ver con la prevención de blanqueo de capitales, algo que tiene a los envíos de dinero a casas de compra de criptomonedas en el disparadero.

«Las criptomonedas están señaladas por la legislación como actividad económica de alto riesgo»

La relación entre banca y criptomonedas sigue siendo, en muchos casos, compleja, aunque en los últimos meses se han dado varios pasos hacia adelante. La filial suiza de BBVA anunció la posibilidad de almacenar y custodiar criptomonedas con ella como novedad para 2021 y MasterCard las integrará en su red de pagos. No obstante, algunas entidades tienen protocolos que complican a sus clientes la compra de estas divisas a plataformas externas.

Hace unas semanas podíamos leer en Forocoches cómo un cliente de Abanca tenía problemas para transferir su dinero a Coinbase, la que es seguramente la casa de intercambio más popular del mundo. «No tenemos ningún interés en las criptomonedas, incluido Coinbase», declara de forma tajante Isaac González, del equipo de Comunicación y Relaciones Institucionales de la entidad gallega. Como es irrelevante que la entidad tenga o no interés en las criptomonedas, sino que se trata de por qué algunos clientes experimentan problemas al comprarlas a un tercero, le pedimos una explicación al origen de estos bloqueos.

Su respuesta es que «los clientes pueden hacer transferencias sin ningún problema, la única cuestión es que las criptomonedas están señaladas por la legislación como actividad económica de alto riesgo y las entidades están obligadas a realizar un mayor control». No responde con mayor detalle a esta cuestión, pero luego entraremos en los pormenores de esos mecanismos de «mayor control».

Bitcoin

En el mismo hilo, podemos ver que otro cliente de ING también se encuentra problemas durante el mismo proceso. Acudimos a María José Bachiller, de comunicación corporativa en ING, quien nos responde en una línea similar a la de Abanca: «En ING no ofrecemos acceso a los mercados de criptomonedas. Nuestra oferta de productos de inversión se basa exclusivamente en productos que coticen en mercados regulados que puedan garantizar la seguridad jurídica de nuestros inversores». Volvemos a aclararles que no se trata de qué productos de inversión incluya en su plataforma y cuáles no, sino de qué motiva que un cliente experimente bloques al enviar su dinero a Coinbase. No volvimos a recibir respuesta.

Banco Santander es una de las entidades que exigen una llamada de confirmación como medida de seguridad antes de hacer efectivo la transferencia cuando el destino es una plataforma de inversión en criptodivisas. Así lo relatan algunos de sus clientes. Ovidio Cordero, portavoz de la entidad, nos explica que «Banco Santander como entidad financiera debe velar por el cumplimiento de la normativa en materia de prevención de blanqueo de capitales y estamos comprometidos a realizar los controles necesarios como parte de nuestras actividades de supervisión”. Nuevamente, como con Abanca, aparece la palabra «control».

Desde Xataka hemos tratado de hacer la misma pregunta a Ibercaja, pero no hemos obtenido respuesta en el momento de publicar este artículo.

La Ley 10/2010

Cristina 2

Si por una parte hay bancos que van abriéndose a la gestión de criptomonedas como producto de inversión, ¿por qué luego hay otros bancos que aluden a la legislación como barrera para mover nuestro dinero libremente? Hemos consultado a Cristina Carrascosa, abogada especializada en criptomonedas sobre la base legal de esta problemática.

La norma en la que se amparan estos bancos es a la del «Real Decreto 304/2014, la Orden EHA 2444/2007 y por supuesto la famosa Ley 10/2010«, nos concreta Cristina, «de Prevención de Blanqueo de Capitales, que a su vez transpone una Directiva Europea con este mismo objetivo (prevención del blanqueo de capitales y de financiación del terrorismo)». Las vinculaciones en forma de sospecha a Bitcoin y al terrorismo es algo que viene de lejos, incluso por parte de la Unión Europea, sobre todo tras los atentados de París en 2015.

«En virtud de esta normativa, cada entidad financiera diseña su política de ‘compliance’ (palabra para referirse a la política de cumplimiento de normativas), con sus controles y alarmas internos, destinada a efectivamente detectar cualquier potencial intento de blanqueo, actividad sospechosa, etc. Esta política de ‘compliance’ a su vez tiene que concretarse en parámetros concretos, como por ejemplo la nacionalidad del cliente, las cantidades, el patrimonio que tiene, la jurisdicción de la que procede la transferencia, entre otros».

Esta política implica que cada banco elige qué tipo de movimientos considera «de riesgo» y así puede bloquearlos, analizarlos y desbloquearlos posteriormente, si se da el caso. Estas políticas forman parte de la documentación pública de cada banco, pero sus descripciones son muy genéricas y no aportan detalle, ni siquiera mencionan a las criptomonedas.

Las medidas de control no tienen por qué ser homogéneas: es posible que dos clientes de un mismo banco que hayan comprado la misma cantidad de criptomonedas tengan experiencias distintas

Una fuente del sector de las plataformas de compraventa de criptomonedas nos explica que «cada banco puede realizar procesos de KYC («Know Your Customer», el proceso bancario mediante el cual las entidades verifican la identidad de sus clientes para prevenir blanqueo de capitales) distintos en función del cliente, de los datos que posea sobre él y del perfil de riesgo que este tenga». Dicho en otras palabras, las restricciones y medidas de control no son uniformes, sino que dos clientes de un mismo banco que compren la misma cantidad de Bitcoin en la misma casa de intercambio pueden tener experiencias distintas, puede que uno no tenga obstáculo alguno y otro tenga que pasar por medidas como la llamada de verificación.

Eso forma parte de las medidas internas de cada entidad, que también contemplan la posibilidad de que alguien haya sufrido un robo de sus credenciales y estén intentando desviar su dinero fuera del entorno bancario, hacia el de las criptomonedas, donde sería prácticamente imposible seguir su rastro para tratar de recuperarlo.

Efectivamente, desde Xataka hemos contactado con 27 personas que han efectuado compras en Coinbase y Binance en los últimos doce meses, e incluso clientes del mismo banco que efectuaron transferencias similares hay discrepancias entre la respuesta ofrecida por su entidad, desde la ausencia de fricción hasta la exigencia de llamadas al servicio de atención al cliente para poder continuar. En otros casos no fue posible usando una tarjeta de débito, sino la de crédito.

Eso sí, el banco no puede bloquear el movimiento sin más, de forma permanente. Puede hacerlo de forma temporal en caso de que internamente salte una alarma preestablecida por dicha política de compliance. Acto seguido, debe liberar dicho movimiento después de que se compruebe que no es un intento de blanqueo o de financiación del terrorismo, los posibles destinos que persigue esta figura.

Una medida de seguridad que solo puede ser temporal si comprueban que no queremos blanquear dinero ni financiar a terroristas

«En general, creo que muchos usuarios están hoy en día confundiendo ‘mover dinero a una casa de intercambio’ con ‘he realizado una operación que no cuadra con el perfil que hasta ahora yo tengo como cliente y he hecho saltar una alarma interna'», explica Cristina en referencia a las posibles suspicacias que pueden levantar bloqueos de movimientos como los enumerados. Es una medida de seguridad que nos previene por si nos han robado los datos de acceso a nuestro banco y alguien trata de enviar dinero a una cartera de criptomonedas, de ahí que habitualmente se requiera de un paso extra de verificación de que realmente hemos sido nosotros, y de que realmente ese es el destino que queremos para nuestro dinero.

Según explica, no se trata tanto de un bloqueo hacia un destino concreto del dinero como de un tipo de operación que figura entre las consideradas como potencialmente de riesgo por parte de un cliente que no tiene recorrido con ellas todavía. Poco que hacer contra ello más allá de recurrir a la paciencia y completar los trámites de seguridad que nos requiera nuestro banco para completar la operación, si es lo que queremos.


La noticia

Quise comprar bitcoins en Coinbase y mi banco me bloqueó la transferencia: qué hay detrás de los problemas comprando criptomonedas

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Xataka

por
Alesya MO

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