Musk está dejando la plantilla de Twitter como mínimo. The question es tener gente necesita para que siga en pie


Si has visto ‘El increíble hombre menguante’, el clásico de 1957 de Jack Arnold, quizás hayas sentido la angustia de ver cómo su protagonista, Scott Carey, perdía su tamaño hasta quedar reducido a un nivel microscópico. Más allá de las (des)venturas que eso le carrea, a lo largo de toda la película hay una duda que persigue al espectador: ¿Hasta cuándo seguirá encogiendo a Carey? ¿Habrá un límite? Desde hace meses en Silicon Valley se mira a Twitter con un interrogante parecido: ¿Cuánto más podrá la tijera Musk por su oficina de RRHH?

¿Cuál es el mínimo con el que se puede mantener un flote de Twitter?

El runrun de los despidos. Mucho antes de que Musk desembarcara en Twitter, lavabo en brazos y con una amplia sonrisa en los bios, lo habien hecho los rumores sobre los despidos que el tycoon aplicaría si llegaba a hacerse con la dirección de la empresa. Un octubre de 2022 el poste de washington aseguró que el multimillonario quería prescindir de nada menos que el 75% de una plantilla de la empresa, que entonces se estimaba en alrededor de 7.500 personas.

Lo cierto es que la gerencia que lideró la empresa para esas fechas ya plantó -según la agencia Reuters- un recorte de 800 millones de dólares en nómina hasta 2023, lo que en términos prácticos equivaldría a dejarla en el camino al trimestre. parte de su fuerza laboral. «Hice crecer el tamaño de la empresa demásimo rapido», llegó a asumir en noviembre, a pleno proceso de recortes de plantilla, el fundador y exdirector ejecutivo de Twitter, Jack Dorsey.

El tijeretazo que no cesa. Y de los rumores, a los hechos. A finales del año pasado, no mucho después de que Musk había adquirido Twitter por 44.000 millones de dólares, trascendió que la empresa tenía en el punto de mira a 3.700 empleados. Los ceses se habrían comunicado ya esa misma semana, por correo electrónico. No serán los únicos. Hace unos dias La información desvelaba un nuevo recorte, de al menos 50 empleados en lo que —asegura el medio estadounidense— supone como mínimo «la octava ronda» de recortes de la era Elon Musk.

España no ha sido ajena. Tampoco grandes mercados, como India. un febrero Los tiempos económicos publicaba que Twitter ha cerrado dos de sus tres oficinas en el país tras prescindir del 90% de los 200 empleados que sumaba hace meses.

Pero… ¿Cuántos empleados tiene Twitter? No resulta fácil concretarlo. El portal Statista señala que a 18 de noviembre de 2022, tras «la oleada de renuncias y despidos masivos» Twitter sumaba 900 empleados, lejos de 7.500 que identificaba en 2021 y bastante por debajo del mínimo anterior de los ultimos años, alcanzado en 2013, cuando Statista atribuyó a la empresa 2.712 empleados.

La última referencia «oficial» de Twitter fue el 21 de enero, cuando el propio Musk aseguró que estaba 2.300 empleados activos. El dato lo publicó como respuesta a un artículo anterior de CNBC que situaba la plantilla en 1.300 personas. Tomando como base la cifra proporcionada por Musk y el historial de Statista, Twitter estaría por debajo de la plantilla de 2013. El periodico de Wall Street isla Tiempos financieros apuntan incluso más abajo, a alrededor de hoy 2.000 trabajadores.

¿Twitter a niveles de 2013? No en todo, claro. Un empleado está por debajo. Al menos si se toman como referencia las cifras que daba Musk hace un mes y las que manejaban en 2013 Statista y de las que se hacen eco medios como Forbesisla El periodico de Wall Street. La cosa cambia si examinamos a los usuarios.

A finales de 2013, cuando salió a bolsa, sus directivos aseguraron que la red social sumaba unos 232 millones de usuarios activos. Enero y de nuevo según datos de Statista, Twitter tenía 556 millones, si bien el poste de washington aseguran que el número de visitantes habituales de la red es inferior: 250 millones. Los resultados fiscales de la empresa registraron en el segundo trimestre del año pasado que la plataforma tuvo 237,8 mDAU (uso activo diario monetizable).

Funciona igual? Aquí está la pregunta clave. ¿Se dejan sentir los recortos en la función de Twitter? El monitoreo de Internet NetBlocks muestra que solo en febrero Twitter aumentó al menos cuatro interrupciones a nivel internacional, casi la mitad que las nueve anotadas durante todo el año pasado. La última es de hace unos días. «Las cosas se romperán más a menudo. Se romperán durante más tiempo», advertía en noviembre Rob Fardon, ingeniero en la compañía.

Si bien los datos de NetBlocks son llamativos lo cierto es que Twitter también sufrió serios problemas técnicos ante los recortes o la llegada de Musk. Hace cerca de tres años, por ejemplo, sufrió un ataque que permitió a los piratas hacerse con varias cuentas, incluidas las de celebrities, como Joe Biden; Barack Obama, Bill Gates y El Propio Musk. Ni Dorsey se libró del hackeo de la suya en 2019.

¿Cómo termina la historia? He ahí la otra clave. El periodico de Wall Street aseguran que se contempla un Silicon Valley con atención a Twitter y la intención de Musk de hacer funcionar la plataforma con apenas una fracción de lo que consiguió ver su plantilla. Al fin y al cabo, su caso puede tener ciertas peculiaridades, pero no es único. En los últimos meses, otras empresas Big Tech, como Google, Meta, Amazon y Microsoft, por nombrar algunas, también se han visto obligadas a aplicar severos recortes de personal durante los años de crecimiento de la pandemia.

En el caso del pájaro rojo de azul, el objetivo es rentabilizar una empresa que, como lamentó Musk, estaba perdiendo cuatro millones de dólares cada día y durante los últimos meses sufrió un «caída masiva de ingresos»con un pinchazo en el flujo publicitario de la plataforma y la pérdida de anunciantes relevantes, lo que ha levado a la compañía a apostar por su servicio de suscripción de pago, Blue.

¿Fuente de aspiración empresarial? «Esto podría servir de inspiración a muchas otras compañías para mirar dentro de la organización y decir: ‘¿Cuánto más eficientes podemos llegar a ser?'», explica a TWSJ Thuan Pham, exdirector de tecnología de Uber Technologies Inc y asesor comercial. «La pregunta es: con el 79% de la mano de obra desaparecida, ¿significa eso que había un 70% de peso muerto?», abunda Brian McCullough, del fondo inversor Ride Home Fund.

«Si demuresa que puede seguir funcionado en su mayor parte, en lo que podría requerir de forma pejorativa como modo de mantenimiento, creo que muchos gerentes se preguntarán si sus productos necesitan tanta gente», concluyó. Otros, como Jason Goldman, de los primeros ejecutivos de Twitter, inciden en que cada etapa puede tener sus propios objetivos: «No está en su fase de hipercrecimiento. Es muy diferente si solo estás tratando de mantener la cosa en marcha».

Imagen de portada: Evan Agostini/AP





Fuente