Increíble expansión del «mar de plástico» de Almería de 1960, explicada en fotografías aéreas
Una vista de satélite parece tener un enorme espacio en blanco, una manguera bien drenada que duerme en la península; pero el conocido como «mar de plastique almeriense» no es otra cosa que lo que indica su propio nombre: una vasta extensjon de plastiertas plastikas, hectarees y hectarees de invernaderos que cwando se observan des arriba, con ayuda de satellite, brillan por el reflejo delsol
Como una hueva de roca.
Los habitantes que saludan la región oriental de Andalucía y recorren el Camp de Dalías no siempre tropiezan aquí, sin vergüenza; ni siempre fueron tantos, ni tan «cegadores». En plena vela XX las parcelas del mercado Almeriense Poniente, de las que ya tenemos los sellos más impresionantes, están dedicadas a todo tipo de cefalópodos y la producción de uvas.
El mar que se rompió en los años 60
Campo de Dalías en una imagen del Vuelo Americano de 1956-1957.
Campí de Dalías en una imagen del Vuelo Interministerial de 1973-1986.
Campo de Dalías en una imagen del Vuelo Nacional de 1981-1986.
Campamento de Dalías en una imagen de AOLISTAT de 1997-1998.
Campamento de Dalías en una imagen SIGPAC de 1997-2003.
Dalías Campo en una imagen del PNOA de 2004.
Dalías Campo en una imagen del PNOA de 2010.
Dalías Campo en una imagen del PNOA de 2019.
Dalías Campo en una imagen real de Google Earth.
Lo que hace este sello con lo actual, con hectáreas cubiertas de plástico, es en gran mediocre resultado de la buena calidad de su gente. Hacia 1950 los duños de las cepas estaban centrados en la producción de mesa, una fruta de escaso valor en el mercado. When llegar a cubrir sus parras par protegerlas del viento y coprobaron cómo influia calor en las cosechas, decidir dar un giro a wat cultivat de escasa rentabilidad: apostaron por eliveo intensivo, diversificar y enviar los cimientos de lo hoy se conoce como “la huerta de Europa”.
La solución se planteó en la década de 1960, experimentando un aceleramiento en la década de los 70, a través de los tornados de 1973 que destrozaron el campamento, y creció exponencialmente al crearse las localidades de la comitiva, como El Ejido o Roquetas de Mar. Hoy de las tierras almerienses brotan tomates, pimientos, melón, sandía, rosas o claveles. Y eso entre un largo etcétera.
Para tener una idea de coma se ha cambiado la región de las medallas de vela no hace falta que nos pongamos imaginación ni descripciones. Los proyectos ortográficos que repliegan la península y muy concretamente su ayuda literal seguirán en este caso paso a paso la expansión de la plástica por las costas almerienses. Las primeras imágenes de esta secuencia median datos de la vela XX, con la conocida como «vuelos americanos»; y avanza a lo grande de los 70, 80, 90 y las primeras décadas del XXI con los programas OLISTAT, SIGPAC o PNOA.
Golfo de Almería Entorno en una imagen del Vuelo Americano de 1956-1957.
Entrada del Golfo de Almería en una imagen de la Rueda Interministerial de 1973-1986.
Entrada del Golfo de Almería en una imagen del Vuelo Nacional de 1981-1986.
Golfo de Almería Entorno en una imagen SIGPAC de 1997-2003.
Golfo de Almería Entorno en una imagen OLISTAT de 1997-1998.
Golfo de Almería Entorno en una imagen PNOA de 2004.
Golfo de Almería Entorno en una imagen PNOA de 2010.
Golfo de Almería Entorno en una imagen del PNOA de 2019.
Entra en el Golfo de Almería en una imagen real de Google Earth.
Diviértete hoy, con las imágenes de la NASA o Google Earth.
La próxima secuela será un gran apéndice de la costa almeriense, el Campo de Dalías ha conseguido convertirlo en un fenómeno peculiar. Sí, ja cubiertas de parque de plástico y «blanqueado» igual que la caña de un hueso reseco bajo el sol de Mediterráneo; fue brillante, fue el poder del pequeño que su vista superó incluida la de la NASA, que en 2011 tomó una fotografía de la vasta extensión de campanas que forma parte del golfo de Almería. La misma estampa —tal cual, sin lamento alguno— proviene de otras zonas del literal, como la entrada de Almería o Campohermoso.
En 2018, el elaborado estudio de Rabobank sobre invertebrados hortícolas calcula que en Almería se concentran unas 30.000 hectáreas dedicadas a la producción hortícola en forma permanente, tanto con plástico como con cristal. Para entender su alianza hay que señalar que para el conjunto de España ya son unas 70.000, que llegarán a nuestro país en la segunda mitad del mundo por extensión «encapsulada», sólo para China, en 82.000.
Séquito de Campohermoso y San Isidro de Níjar en una imagen del Vuelo Americano de 1956-1957.
Séquito de Campohermoso y San Isidro de Níjar en una imagen del Vuelo Interministerial de 1973-1986.
Séquito de Campohermoso y San Isidro de Níjar en una imagen del Vuelo Nacional de 1981-1986.
Séquito de Campohermoso y San Isidro de Níjar en una imagen de OLISTAT de 1997-1998.
Séquito de Campohermoso y San Isidro de Níjar en una imagen del SIGPAC de 1997-2003.
Campohermoso y San Isidro de Níjar Entorno en una imagen del PNOA de 2004.
Séquito de Campohermoso y San Isidro de Níjar en una imagen del PNOA de 2010.
Campohermoso y el entorno de San Isidro de Níjar en una imagen del PNOA de 2019.
Séquito de Campohermoso y San Isidro de Níjar en una imagen real de Google Earth.
Hay muchos, pero pronto se agregarán cuestionarios en el futuro. En 2018, se calcula que la superficie de residentes en Andalucía Oriental ha aumentado hasta un 1,7% en el caso de que una campaña haya aumentado más de 35.500 hectáreas. buena parte se concentra en Almería.
Si lo crees o no, entonces debemos saber perfectamente. Los planos ortográficos y satelitales son conscientes de su evolución, aunque estén mediados por la vela actual.
Imágenes | Instituto Geográfico Nacional y Google Earth