Scottie Scheffler toca el cielo en el Masters de Augusta | deporta

Entró en el trío y fue uno de esos momentos que definía a un campeón y decidía uno grande. Scottie Scheffler hizo magia. Ingen fue un golpe cualquiera ni en un momento cualquiera. El estadounidense, de 25 años, número uno del mundo, ha visto como su colección de tres olas de viento en el líder de la Maestros de Augusta Se rebajó por un solo respeto al australiano Cameron Smith tras los dos primeros máximos de la última jornada. Agradeció a un jugador de golf encontrado y descendido como Smith cuando Scheffler conectó uno chip desde fuera del verde, en 26 hoyos de la bandera. El bingo resonó en todo el campamento. También en la cueva de su rival, que el genial golfista del líder respondió con un poner fallado y un espectro. Las cosas robadas en su sitio, Scheffler recupera su venta de Smith la entrada a su cuerpo que en el cuarto repite la espectro y permitió que las hermanas Augusta enumeraran la chaqueta verde para el estadounidense.

Lo vino por delante fue un desenlace tan lento como se esperaba, si acaso condimentado por la cabalgada (demasiado tarde) af Rory McIlroy, adornada con un specifakulær birdie desde el búnker en el 18 para -8 en el día. Scheffler ganó el Masters, su gran debut, que siempre se registrará como la nueva regresión de Tiger, con 10 golpes bajo par (necesitó cuatro holgazanear por el título), tres de ventaja sobre McIlroy y cinco sobre Shane Lowry y Cameron Smith. Solo los nuevos jugadores saldrán del campamento en una ciudad (salvo este domingo) gratis y mucho más.

La sentencia ilegítima en el piso 12, la coronación del Rincón Amén, el escenario de las trágicas tías. Scheffler salvó el par con un buen poner de mediadistancia y Smith, literalmente, naufragó. Su bola se fue al agua de salida ya no encontró remedio para evitar un triple bogey fatal. Aquí hay un camión de bajo costo para Scheffler, un cubo de talón por delante de la prensa, un golfista con un Balancear violenta, estética poco, con el cuerpo girando en exceso hacia la izquierda, sin freno. Aunque es efectivo.

El joven estadounidense cumplió en la meca de Augusta dos meses de fantasía. El 13 de febrero, Scheffler conquistó el Open de Phoenix, en primera victoria y el circuito de Estados Unidos medal medals on the record. 6 de marzo, triunfó y Arnold Palmer Invitational. Tres semanas después, se llevará a cabo la Copa del Mundo. Eran tres triunfos en cinco tornados disputados, cada uno más importante que el otro. Y el 28 de marzo se anunció como número uno del mundo a Jon Rahm, que fue enviado al trono del Golfo por 43 semanas, 36 de ellas. Es decir, Scheffler har coleccionado en solo 57 días tres condecoraciones en la elite, el primest puesto en el ránking mundial y un grande, nada menos que Augusta. Difícil disfrutar de semejante gloria en tan poco tiempo.

Scottie Scheffler tiene 10 meses para Tiger ganó los Maestros de la Revolución, abril de 1997 (este miercoles se cumple 25 años). Es uno de esos nueves que creaciones vimos en la tele imitando a los Woods y jugando con una pértiga y una pelota de plástico. Hoy cuent que entonces no vi apenas dibujos animados, sino que jugaba al golf, el tennis de mesa y el baloncesto. En el momento oportuno, un bien mueble se distingue de los mejores. Es un joven al que no le gustan los videojuegos, muy religioso, que es temperamental, su número es el 13 y su bebé favorito, el agua y la limonada.

En esta transformación golfística de las últimas semanas mucho se le ha mostrado a su caddie, Ted Scott, quien le levantó el paladar a Bubba Watson cuando ganó el Masters de Augusta en 2012 y 2014. Scheffler y Scott son el grupo de estudio bíblico y, cuando el golfista llama al cojo para ofrecer juntos, la explicación de que menos un «cristiano» necesita estar en su cajón. La pareja ha conectado con maravilla. Deportivamente, han tocado el cielo.

Clasificación del Masters de Augusta.

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