Reformar y continuar
En los últimos meses ha habido una creciente ola delictiva en Nueva York, particularmente en el Bronx y Manhattan, que habría sido superada desde que el alcalde Rudolph Giuliani asumió las riendas del gobierno de la ciudad en 1994 y ha aplicado la llamada «teoría de la violencia rota». «. ventanas”, que culpa al vandalismo y la degradación de los barrios de atraer a drogadictos, merodeadores, que a su vez son perseguidos por delincuentes y criminales violentos.
En ese momento, el crimen se había descontrolado y la policía de Nueva York había perdido todas sus batallas.
Fue la mano dura contra el crimen aplicada por Giuliani y su controvertida “Limpieza Cívica” lo que devolvió la confianza de la gente decente para deambular por las calles de la ciudad sin temor a ser asaltados o asesinados, de igual forma recuperó la autoridad que habían perdido los uniformados. .
Sin duda fue un trabajo duro que valió la pena. Un éxito. Es innegable que sin firmeza no se puede pensar en enfrentar un problema tan grave como el que entonces enfrentó la Gran Manzana y el que sufre la República Dominicana desde hace años.
Con lo anterior, desde la ciudad de Nueva York, se ha hecho evidente la importancia de seguir los planes puestos en marcha para resolver cualquier situación difícil, del mismo modo, se demuestra que los antisociales solo esperan el más mínimo incumplimiento para hacer de las suyas y imponer su ley.
En nuestro país estamos hablando de una reforma de la policía, una iniciativa llena de esperanza, que todos esperan que dé los resultados esperados. Las personas que integran las distintas comisiones que trabajan en dicha reforma constituyen un aval de la seriedad con que el presidente Luis Abinader ha abordado el tema.
Los tiempos ameritan una policía más moderna, tecnológica, capaz, pero también más integrada a la comunidad, y sobre todo compuesta por hombres honorables y honestos, en quienes la gente vea apoyo. Alguien en quien confiar.
De la misma manera, las autoridades actuales y futuras deben dar continuidad a todo lo que se hace hoy, de lo contrario será una pérdida de tiempo y un trabajo intenso y minucioso, con el riesgo de que cada día los delincuentes perfeccionen sus prácticas y se vuelvan más difíciles de tratar. con.
la entrada Reformar y continuar fue publicado por primera vez en el diario del caribe.