Reed Hastings renuncia como CEO de Netflix en medio de un panorama desafiante para la empresa


El cofundador de Netflix, Reed Hastings, acaba de anunciar su dimisión como uno de los consejeros ejecutivos de la compañía. Tras una década al frente de la plataforma de streaming, el empresario ha decidido ceder su puesto al director de producto, Greg Peters, que estará al frente de la dirección junto a Ted Sarandos.

«Nuestra junta ha estado discutiendo la planificación de la sucesión durante muchos años (¡incluso los fundadores deben evolucionar!)», dijo Hastings en un comunicado oficial. «La junta y yo creo que es el momento adecuado para completar mi sucesión». El empresario, no obstante, ahora ocupará el cargo de presidente ejecutivo de Netflix.

Cambios internos en la empresa de streaming

Según Hastings, los movimientos en dirección a Netflix forman parte de un plan de sucesión ha estado gestando durante mucho tiempo. Además, asegura que confía en las capacidades de Peters para estar al frente de la empresa, que ya tuvo su “bautismo de fuego” con los desafíos que afectan al negocio y la pandemia.

Ahora, desde el puesto de presidente ejecutivo, Hastings dice que será un puente entre el directorio ejecutivo y la dirección ejecutiva de Peters y Sarandos, a quienes brindará especial atención y colaboración. Además, el cofundador de la plataforma también señala que estará «muy focalizado» en que las acciones de Netflix funcionan bien.

Hastings, que en 2016 creó un fondo de 100 millones de dólares destinados a impulsar iniciativas relacionadas con la educación, explica que estos cambios se traducirán en la posibilidad de dedicar un mayor parte de su tiempo a la filantropía. Después del anuncio, según Yahoo! Finance, las acciones del gigante del streaming subieron aproximadamente un 6% fuera de horas.

Ahora bien, Peters y Sarandos se encuentran frente a un panorama desafiante. La competencia en la industria, con actores de peso como Disney+, HBO Max, Paramount+, Amazon Prime Video, entre otros, es colosal. Netflix ya no es el rey del streaming que solo ve, y hay un proceso de mejora de sus propuestas para conquistar el mayor número de suscriptores posibles.

En el primer trimestre del año pasado, por primera vez en una década, Netflix perdió usuarios, en concreto 200.000. En el segundo trimestre, las cosas no mejoraron y la caída alcanzó los 970.000 usuarios. Sin embargo, la compañía puto en marcha una serie de cambios, entre ellos un plan barato con anuncios, y antes de cerrar el año volívo a crecer, sumando 7,66 millones de suscriptores en el último trimestre.

Imágenes: netflix

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