Padres acusados ​​de homicidio involuntario en tiroteo en EE. UU. – el Nacional

Acusan a padres de homicidio involuntario en tiroteo en EEUU


Por: COREY WILLIAMS y ED WHITE

PONTIAC, Michigan, EE. UU. (AP) – Un fiscal presentó el viernes cargos de homicidio contra los padres de un adolescente acusado de matar a cuatro estudiantes en una escuela secundaria de Michigan. El fiscal alegó que los padres no intervinieron el día de la tragedia a pesar de haber sido confrontados con un dibujo y un escalofriante mensaje – «Sangre por todas partes» – que se encontró en el escritorio del joven.

James y Jennifer Crumbley cometieron actos «atroces», desde comprar un arma el Viernes Negro y ponerla a disposición de Ethan Crumbley, hasta resistirse a que lo sacaran de la escuela cuando fueron convocados horas antes del tiroteo, explicó el fiscal del condado de Oakland. , Karen McDonald.

«Espero que los padres y todos tengan humanidad y que intervengan y detengan una posible tragedia», agregó. «La conclusión que saco es que había una razón absoluta para creer que este individuo era peligroso y estaba perturbado».

Las autoridades dijeron a media tarde que estaban buscando a la pareja. El alguacil Mike Bouchard dijo que el abogado de los Crumbley, Shannon Smith, había acordado organizar su arresto si se presentaban cargos, pero no había podido localizarlos.

Smith, sin embargo, aseguró que los Crumbley no huían y que habían abandonado la ciudad a principios de semana «por su propia seguridad». «Regresarán al área para ser procesados», dijo Smith a The Associated Press.

Anteriormente, el fiscal dio el relato más preciso hasta el momento de los hechos relacionados con el tiroteo, tres días después de que cuatro estudiantes murieron y otros resultaron heridos en Oxford High School, a unos 50 kilómetros (30 millas) al norte de Detroit.

Ethan Crumbley, de 15 años, salió del baño de la escuela con una pistola que disparó a los estudiantes en el pasillo, dijeron los investigadores.

Se le acusa como adulto de asesinato, terrorismo y otros delitos. Según la ley de Michigan, se puede presentar un cargo de homicidio involuntario contra los padres si las autoridades creen que alguien contribuyó a una situación en la que había una alta probabilidad de daño o muerte.

Los padres en los Estados Unidos rara vez son acusados ​​en relación con tiroteos escolares que involucran a sus hijos, incluso cuando la mayoría de los menores han obtenido armas de la casa de un padre u otro familiar, dicen los expertos.

Las autoridades escolares se preocuparon por el joven Crumbley el lunes, el día antes del tiroteo, cuando un maestro lo vio usando su teléfono celular para buscar municiones, dijo el fiscal McDonald. La escuela se puso en contacto con Jennifer Crumbley, quien más tarde le escribió a su hijo un mensaje de texto que decía: “No estoy enojado contigo.

Tienes que aprender a no ser atrapado «, según el fiscal. El martes, un maestro encontró una nota en el escritorio de Ethan y le tomó una foto. Era una imagen de un arma apuntando a las palabras:» Los pensamientos no «Ayúdame», dijo McDonald.

También había un dibujo de una bala, agregó, con la frase «Sangre por todas partes» en la parte superior. Entre la pistola y la bala había una persona que parecía haber recibido dos disparos y estaba sangrando. También escribió las frases: «Mi vida es inútil» y «El mundo está muerto», según el fiscal.

McDonald enfatizó que la escuela rápidamente organizó una reunión con Ethan y sus padres, a quienes se les dijo que lo llevaran a terapia dentro de las 48 horas.

El fiscal señaló que los Crumbley no le preguntaron a su hijo por el arma ni registraron su mochila, y «se resistieron a la idea de que su hijo dejara la escuela en ese momento». El adolescente regresó a clase y luego ocurrió el tiroteo.

“La noción de que un padre pueda leer esas palabras y saber además que su hijo tuvo acceso a un arma mortal que le dieron es inconcebible, es criminal”, dijo el fiscal.

White informó desde Detroit. Los reporteros de Associated Press Mike Householder en Detroit y David Eggert en Lansing, Michigan contribuyeron a este informe.

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