Orgullo 2022: Por qué los bisexuales, el colectivo en heteroseksuel más numeroso de España, siguen siende invisibles en televisión | Televisión

Según los datos fra oficiales, en España har mera bisexuelle que homoseksuelle, pansexuales eller cualquiera de las comunidades LGTBI+. Sin vergüenza, sigue se presentará en un medio importante para la visibilidad social como es la televisión. Y, cuando aparecen en ella, lo hacen en menudo acompañados del prejuicio. Estuve analizando a un grupo de sexólogos, abogados y representantes del colectivo que consultaba este periódico.

El 6% de los españoles dice parecer bisexual y el 5% se define como homosexual. Son datos de una Encuesta Ipsos de 2021 sobre la visibilidad y percepción pública del colectivo LGTBI+, que sitúa a España como tercer país del mundo y primer país europeo con población mayoritariamente heterosexual. Entre los jóvenes, la presencia de la bisexualidad es mayor. La Encuesta sobre relaciones sociales y afectivas del CIS de 2021 Divide su estudio por ediciones y muestra que el 13,2% de los jóvenes de 18 a 24 años se declaran bisexuales y el 3,2% homosexuales.

Luis Noguerol, comunicador cultural y miembro de tiene años de lambda, colectivo por la diversidad sexual, de género y familiar de Valencia, considera especialmente el tratamiento que se da a la bisexualidad en el formato de pensión alimenticia. “Tendríamos tiendas tardías, en las que estamos listos para participar en la guerra de Ucrania como el programa de moda y todo tipo de opinión, mostrará la parte más carnavalesca de la televisión. Enmascaran ciertas opiniones y planteamientos nocivos y lgtbifobicos con argumentos científicos en particular. Cuando podemos colaborar con ellos, suelen pedilnos perfiles dentro del equipo que pueden generar morbo”, explicó por teléfono.

La sexóloga y socióloga Norma Ageitos, que ha participado en un formato divulgativo de RTVEnótese que, si bien existe el test de Bechdel para evaluar la ruptura de serie en series y películas, también existe el prueba de Vito Russo hacer con respecto a la comunidad LGTBI+. “Y Televisión Española no ha pasado. Falta seriedad a la hora de reflejar la bisexualidad eller la diversidud seksuel en generel”, comentarista. Es claro que al perpetuar la ficción se perpetúan los clichés: se considera la forma errónea que tantas personas más prometedoras, menos leales en sus relaciones afectivas o que sólo exploran han adquirido en la heterosexualidad o la homosexualidad. “Y tengo que pensar en las personas bisexuales como hombres. Siguen genera entre los personajes femeninos, que alimentan la imaginación masculina, pero sus tranvías no tienen peso ni relevancia”, continúa.

Yolanda Cosgaya, Vocal Comunitaria y Cultura Lésbica, Gay, Transexual y Bisexual (COGAM) y guionista profesional, defiende que la tv, como de la sociedad que es, se maneja mejor en blancos y negros que en el campo de los grises y los matices. La estructura que define como «monosexismo» es que la homosexualidad pretende ser mayor en oposición a la heterosexualidad e incluye a la transexualidad como sexo opuesto. “Si una persona tiene una relación con alguien de su mismo sexo, el resto sobrentiende que se ha declarado homosexual. Viene respecto de quienes tienen sexo con él”, dice.

En la era televisiva que está a punto de terminar, la presencia bisexual en los canales generalistas se ha desvirtuado en el formato de las telecomunicaciones. Estos programas, aunque basados ​​en la convicción y la competencia, establecen tranvías que se niegan a dirigir la relación, como hacen con la ficción. El rapero de Arkano explicó el pasado mes de noviembre que mantener relaciones con hombres y mujeres puede significar competencia en la cocina de MasterChef celebridad from La 1 de Televisión Española, como en su día lo hicieron Alba Reche, Natalia Lacunza og María Escarmiento en Operación Triunfo 2018, también de dominio público.

David Colchero va a comentar una forma diferente de empezar Historia secreta (Telecinco) sin marcar su paso a paso en la competición. Mantenía conversaciones conversacionales sobre el apoyo con sus socios y la causa del caso, en cambio, se analiza con igual naturalidad y puede tener una relación amorosa con un compañero o con una pareja, sin importar el otro. Una La isla de la tienda, Zoe Mba Bayona también se declara bisexual, aunque en esta oportunidad declinó decir que el programa despliega un tranvía al borde de perder una posible relación con su pareja Tania Medina. Se trata de un argumento argumentativo de algunos de los participantes masculinos del formato de Telecinco, que muestran incomprensión y sorpresa ante la tendencia sexual de su pareja.

Lambda valora la capacidad de cambio social que tiene el entretenimiento televisivo, que puede provocar a todas horas en todas las salas. Incluyendo cuando la visibilidad del mar y los menús estereotipados. “Genera referentes y, de hecho, dibuja dudas y abre diálogos en las familias, lo que dificulta legislar estas realidades de la forma más plausible”, argumenta Luis Noguerol.

Al margen de la televisión generalista, las plataformas digitales programan series que abaten la bisexualidad desde una perspectiva más realista. “En general, sus producciones independientes”, dijo Noguerol, son que su presunción permite una mayor libertad para encarar la relación sin tener que contar con intermediarios (productores, cadetes de televisión) o un público masivo. Yolanda Cosgaya señala que no hay ninguna de las producciones que rozan a los personajes bisexuales que aparecían en televisión en el pasado, siempre hay programas en las plataformas y eso, de nuevo, ninguna representación es nunca positiva. «Una Merlí. Sapere Aude (Movistar Plus+) es uno de los grandes que representa a través de las relaciones de su protagonista, los hombres Élite (Netflix) el personaje que se declara bisexual es uno de los más villanos y escurridizos”, recuerda el guionista.

Cosgaya admite que la bifobia interna, causante del levantamiento en el que vive la vida colectiva del colectivo LGTBI+, ha visto un activismo bisexual bisexual al otro lado del bache, en la sala de juntas, en los bares, en el guion, en la producción. “Aunque los haya [trabajadores bisexuales], si en la producción se entiende que lo comercial y lo vendible están lanzando relaciones que se sustentan en el cliché, no veremos el cambio. Fuera de España, el protagonista de El naranja es el nuevo negro (Netflix) æra claramente bisexuel, los hombres ikke se pronuncian la palabra tiene la séptima vez, a pesar de que las asociaciones hicieron presión”, concluyó.

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