Kirchner apunta contra la justicia por atentado fallido en Argentina
«Desde el amigo de lo judicial se da licencia social para que cualquiera pueda pensar y hacer cualquier cosa», enfatizó Kirchner, al cuestionar también a la oposición política y la prensa.
«Eso es crear un clima», se lamentó. «Me siento muy en estado de defensa, muy intranquila», agregó en su intervención ante el tribunal que escuchó los alegatos finales de la defensa, última etapa antes de que los jueces emitan su veredicto.
Debido a sus fueros parlamentarios, Kirchner no puede ser detenida ni inhabilitada mientras no haya una sentencia firme en su contra de la Corte Suprema de Justicia.
En su defensa de una hora y media, Kirchner declaró «un claro caso de prevaricato».
«El fiscal (Diego) Luciani y el fiscal (Sergio) Mola mintieron en el alegato fiscal de acusación. Es un juicio lleno de mentiras, calumnias y difamaciones», sostuvo en la intervención realizada a distancia desde su despacho de la presidencia del Senado.
Un pequeño grupo de sus seguidores se congregó a las puertas del Congreso con banderas y pancartas mientras Kirchner hacía el alegato.
El vicepresidente protestó porque el tribunal había desestimado en agosto concederle una ampliación de su declaración indagatoria, que solicitó tras los alegatos de la Fiscalía en los que, según ella, se habían incorporado nuevos elementos.
Por ello, enfatizó que su intervención de este viernes “no es una graciosa concesión del tribunal”, sino una prerrogativa que le da el hecho de ser abogada de profesión.
Un juicio oral iniciado en 2019 es acusado junto a otras doce personas por supuestamente haber orientado la concesión de licitaciones de obras públicas en la provincia de Santa Cruz (sur), su cuna política, a favorecer al empresario Lázaro Báez.
Se espera que el veredicto se conozca hacia fines de este año.
Kirchner ha sido sobresída en varias causas por presuntos delitos ocurridos cuando fue presidente, pero aún emfrenta cinco procesos.
