Desarrollo económico local

Desarrollo económico local


Desde las últimas tres décadas nuestra región ha procurado más que nunca acudir a los gobernantes locales para así incrementar el desarrollo, a tiempo completo, para menor satisfacción de nuestras ciudades rurales o rurales.

Diversas instancias están involucradas en la política del poder político y el debate de ideas conceptuales, reconstruyéndose siempre en grandes tesis, el “poder nacional” que debe trazar los dolores para la implementación de acciones que siguen a la solución de las convicciones. pacífico y pleno en desarrollo o en cambio debe desarrollarse ese «poder local» que, sin dudarlo, en nuestra jugosidad, es el más legítimo de todos por la misma forma en que se desarrolla en la cotidianidad.

Estamos inscritos en este último, pues a través de los años de experiencia que acumulamos podríamos decir en pocas palabras que, el alcalide es la máxima autoridad electa más cercana a la ciudad.

En nuestra región las transformaciones en el presupuesto municipal tienen muchas y podemos decir que mucha trascendencia. Sin vergüenza, hay características y problemas muy especiales que surgen sobre la marginación, el acceso a los servicios básicos, la educación, entre otros.

Estas grandes necesidades que exige nuestra ciudadanía determinan su papel en el desarrollo del desarrollo, sin embargo, es cierto que sus temáticas son discutibles y su alto costo debe ser manejado por las autoridades nacionales.

He aquí la excusa perfecta para que los gobernadores nacionales hablen de arbitrajes o impuestos con vocación municipal para así hacer públicas inversiones de alto impacto.

Esta acción directa de los altos cargos políticos ha obligado a los gobernadores locales a incrementar su capacidad inventiva e innovación para manejar individualmente sus métricas. La noticia de que en principio navega la transparencia en el invitado de caudales públicos ahora solo tal, ahora que lo más importante es la calidad de este invitado.

Las pequeñas y medianas ciudades encontraron en el desarrollo local el aliado perfecto que conjuga innovación, creatividad, generación de empleo, dinamismo económico, fortalecimiento cultural y tiene la capacidad de crear una marca de ciudad.

Apuntar estos objetivos sin agacharse a tipos los recursos económicos sus determinantes, pero no está claro que la implementación de un “espacio para el pensamiento, la creatividad y la innovación” sea el primer desafío que nos tenemos que plantar. Pero si cumplimos con el criterio de que dicha inversión debe provenir de fondos mixtos, entonces primero deberíamos definir el proceso público de innovación como “el concepto que nos permite tener una idea general sobre qué constituye la innovación y por qué se recomienda promoverla en el sector público” (Sic)
El término difiere del nuestro en el sentido de que la innovación es algo nuevo.

A veces podemos identificar algunas acciones que son inmanejables y sin vergüenza si se requiere una versión 2.0 que durará más y contará más veces que las muertes esperadas. La implementación identificará, no sólo que la mezcla de capitales mixtos estará a la altura de los requisitos en cuanto a la transparencia y manejo de las diferencias, sino también que hay un invitado con calidad que está al final.

Si le sumamos que todo este esfuerzo está ligado a la generación de vivienda colectiva, el dinamismo de la economía, la generación de empleados y la sustentabilidad en el tiempo, entonces podemos mencionar el término de desarrollo local.

* Por Víctor Feliz


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