Cazan un caimán de 3,5 metros y resuelven el misterio de la desaparición de unos perros hace 24 años

Un hombre que perdió a sus perros hace 24 años finalmente ha logrado saber qué pasó con ellos, ya que sus collares se encontraron casualmente en el estómago de un enorme caimán de más de 3,5 metros.

Tal y como recoge el Mirror, el caimán, que se estima que tenía entre 50 y 70 años, había sido llevado para su despiece en Cordray’s, una planta de carne de caza silvestre de Carolina del Sur, por el cazador, de nombre Ned McNeely.

Cuando el personal de la carnicería se puso a trabajar, descubrieron todo tipo de objetos extraños en el estómago de la criatura, incluidas etiquetas no digeridas de cinco collares de perro.

Uno de los collares todavía tenía un número de teléfono visible, así que cuando llamaron, el equipo de Cordray’s se sorprendió al descubrir que todavía estaba activo. «Dos de las etiquetas eran legibles y un número de teléfono aún funcionaba», escribieron en el perfil oficial de la carnicería en Facebook.

«El dueño dijo que había cazado en la misma área (donde fue cazado el caimán) hace 24 años y que eran de sus perros», añadieron.

El descubrimiento ocurrió completamente por casualidad, ya que el personal de la carnicería generalmente se abstiene de abrir los estómagos de los caimanes debido al contenido en descomposición que contiene.

«Normalmente no miramos al estómago. Eso es porque una vez abrimos el estómago de uno grande hace años, y había un pez de 90 cm muy podrido dentro. Olía tan mal que todos tuvieron que irse», añadieron.

También dentro del reptil, de 200 kilogramos de peso, había un chaleco antibalas, una bujía, montones de caparazones de tortuga y varias garras de lince. Según los medios locales, los caimanes de Carolina del Sur generalmente crecen hasta 4 metros y viven más de 60 años.

Cordray’s está dirigido por Claudia y Michael Cordray. Manejan más de 100 caimanes al año y pueden convertir su carne en salchichas o cecina. Además, tienen servicio de taxidermia y pueden transformar un caimán muerto en cualquier cosa, incluso en una lámpara de pie.



Fuente