Cabañas abrieron, pero la visita de clientes es tímida



El sector de los moteles y cabañas, luego de meses sin operación, empezó a abrir desde este miércoles, pero los propietarios buscan alcanzar el punto máximo en la llegada de huéspedes, puesto que en los primeros días la visita de clientes ha sido tímida en comparación con antes de la pandemia del COVID-19.

La tarde de este jueves, Diario Libre visitó los moteles del kilómetro 12 de la carretera Sánchez, donde algunos empleados consultados indicaron que la visita de clientes ha sido alrededor de un 44% menos que en los días previos a la pandemia.

Sin embargo, esperan que se activen al pasar de los días. “Antes llegaban cada día hasta 90 parejas, solo viene alrededor de 40 diario”, indicó un colaborador.

En cambio, otros empleados indicaron que el flujo de visitantes ha sido casi normal en los primeros días de apertura.

Las del kilómetro 12 de la Sánchez junto a la autopista de San Isidro son los puntos más populares en este discreto sector, que estratégicamente están ubicados fuera del casco urbano para mantener la discreción.

La Uni, Kiss, Bayamesa, OK, Queen, Míster, Tía Tania, Costa Azul, Love, Yes, entre otros, son los moteles que operan en este lugar en el llamado kilómetro 12. Sus precios oscilan entre RD$400 y RD$900, dependiendo de la calidad de las habitaciones y el tiempo, acorde a datos de los colaboradores.

Algunas de estas cabañas estaban abiertas, mientras que otras permanecían cerradas. Se vio que algunas estaban en remodelación.

Al preguntársele sobre el protocolo sanitario que exigen las autoridades para evitar la expansión del COVID-19, dos colaboradores que omitieron sus nombres, indicaron que en sus respectivos lugares la higiene no es la adecuada, puesto que las habitaciones no tienen desinfectantes de manos, ni los colaboradores usan la debida protección para limpiar los lugares.

Sin embargo, otros manifestaron que donde trabajan sí hay la protección idónea tanto para los clientes como para los empleados. Incluso, Diario Libre contactó que en un motel el personal de limpieza usa trajes de protección similar al de los hospitales.



Fuente