‘Big data’ contra la esclavitud del chocolate | Salva a los expertos | Planeta Futuro

Parece que en la vela XXI estamos todos esclavizados por la esclavitud. Y mucho más, de la esclavitud infantil. Pero para los nueves que cultivan grandes cantidades de cacao, en régimen de semiesclavitud en varios países africanos, hay un calvario silencioso del que todos nos complicamos cuando compramos una barra de chocolate.

Casos de millones de libertades privadas, trabajando sin descendencia, usando machetes y pesticidas, para recoger la manteca de cacao. A los niños del nuevo año se les cobra de más por trabajar, pasar tiempo juntos e ir a la escuela.

La industria del cacao ha estado tratando de abordar este problema. En 2010 se fijó el objetivo de reducirlo a menos del 70%, recaudando más de 200 millones de euros. Syndeembargo, sigún una información del Departamento de Trabajo de los Estados Unidos (ILAB), entre 2010 y 2020 el trabajo infantil en la cadena productiva del chocolate no solo no ha disminuido, sino que ha aumentado del 30% al 41%.

Se cree que tiene una gran cantidad de empresas, de las cuales las nuevas ciudades tienen programas de incentivos para los agricultores de toda la industria. P.ej, Nestlé acaba de anunciar el pago de 500 francos anuales de anualidad –480 euros– para que el ganadero mantengan a las novillas escolarizadas, pero está claro que no es suficiente. El aumento de la producción de cacao, esta se duplicó en 10 años, unido al aumento de las familias involucradas en su producción (del 58% al 83%), ha provocado la expansión a zonas con menor vigilancia, lo que ha agravado el problema.

Además de las certificaciones, al menos tres cuartas partes de la producción de cacao no es posible rastrear su origen. El cacao aparece milagrosamente al principio de la cadena trasladado a un asilo sin indicios de donación de aceite producido por nadie, vendido a granulado por agregadores locales.

El trabajo infantil en la cadena productiva del chocolate solo no ha disminuido, es decir ha aumentado del 30% al 41%

La clave para superar estos desafíos es un mejor uso de los datos que, según Examen del comercio mundial existe Las fincas cooperativas de cacao tienen datos de sus miembros, pinzones y lechos de cacao; algunos de ellos incluyen el puesto de trabajo, la protección de cultivos, asistencia con aforos o un mapa GPS detallando todos sus pinzones. Cada cooperativa utiliza un sistema, aunque rudimentario, para filtrar los grandes. El problema es que todos estos datos están desagregados y dispersos, destacados en hojas de cálculo, en escritorios portátiles o en libros de contabilidad en papel.

La digitalización está llevando la trazabilidad a un nuevo nivel, haciendo posible conectar digitalmente al agricultor con la cadena de valor. La figura clave en este proceso son sus «delegados»: miembros de la cooperativa que viven en la comunidad y que actúan como si fueran entre los dos. Incorpora nuevos socios, recoge su cacao, ingresa a la cooperativa y asegura que los agricultores reciban su pago. Con PDA y software específicamente conectado a balanza digital, etiquetas con códigos de barras o sensores, biometría de huellas dactilares, entre otros, recogen todos los datos de cada transacción.

Pero el valor real del análisis de estos datos. Es la capacidad de estos sistemas para analizar datos complejos y extraer conclusiones, lo que es transformacional.

Los datos detallados de las casas de los campesinos son la clave para erradicar el trabajo infantil. Si el sistema es seguro, las ediciones de los nichos y las escuelas en las que están registrados pueden ser alertados automáticamente si existe una alta probabilidad de que los nueves no estén asistiendo a la clase. Soluciones de captura habrá un paso más con un programa piloto implementado por UNICEF en varios colegios de Secundaria. Instalar un sensor biométrico de hueles dáctiles, control de asistencia. Recién ahora las certificadoras pueden comprobar el registro, la digitalización y la presencia real.

los datos detallados sobre los sombreros de los granjeros son la clave para erradicar el trabajo infantil

El mapa GPS de los pinzones también permite a las cooperativas demostrar que sus socios no están produciendo cacao en áreas forestales protegidas, incluso identificando las áreas con mayores y menores de rendimiento. Lo que facilita el seguimiento de las acciones correctivas o la erradicación de la estafa.

Con el uso de cadena de bloques Para garantizar la trazabilidad de los datos, los certificadores quedarán adelantados y tendremos una foto precisa de dónde residen los problemas que podrían atajarlos.

Pero está el problema de los desechos radicales y los medios de vida de los productores de cacao. Como dicen, nadie quiere obligarse a trabajar para sus hijos, sino la situación de necesidad en la que se encontrarán con la otra opción. La gestión es eficaz para transformar el futuro. Una vez que sea visible y capaz de analizar, se beneficiará de la financiación bancaria, los seguros, la capacidad, los mejores seguros y las técnicas agrícolas. Soluciones reales para aumentar sus siglas, que están sacrificando sus vidas por un trabajo que no podemos consentir.

El resultado de las cohortes de cacao es muy aburrido, pero la digitalización del proceso es realmente amargo. Interponerse en nuestro camino mientras los consumidores aseguran cómo comprar ese chocolate certificado con mayor apoyo a los productores, así como tratar de comercializar para abolir el trabajo infantil. Y tienes que pagar el precio más alto por un chocolate esclavo gratis.

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