Activar la cuenta atrás de las elecciones


Formar gobierno ahora mismo se ha convertido en una encrucijada para los dos principales partidos políticos de nuestro país. Ya los resultados de las elecciones generales auspiciaron un escenario quisquilloso con una salida lejana. A pesar de que el PP se impuso en los comicios, la suma con Vox no le bastó para acceder a la Moncloa. Los escaños de la izquierda tampoco fueron suficientes. Ante esta situación, el Rey Felipe VI propuso al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, como candidato a una investidura.

El candidato popular trabajó durante un mes para intentar reunir los apoyos necesarios. Pero, a no ser que suceda algo inesperado, todo apunta a que su misión será fallida.

El arranque. La primera sesión del debate de investidura arrancó ayer martes 26 de septiembre. El líder de los azules abrió el pleno del Congreso para presentar un programa de gobierno (con distintas propuestas económicas, sociales e institucionales) lejos de salir adelante. Él mismo terminó su intervención asumiendo que no será elegido presidente y afirmando: “Prefiero retrasar mi victoria para que sea también la victoria de todos los españoles”. Por ello, aprovechó el debate para transformarlo en una especie de “moción censura” y estrenarse como líder de la oposición.

Las posibilidades. Las cuentas no le salen a los populares. Y todo apunta a que la tentativa de Feijóo fracasará, ya que para formar gobierno necesita sumar mayoría absoluta (176 escaños). Ahora mismo sólo cuenta con un total de 172 escaños, con el apoyo de Vox, Coalición Canaria (CC) y Unión del Pueblo Navarro (UPN). Una de las llaves era el PNV, cuyos 5 escaños le permitirían llegar a la Moncloa. Junts también tiene 7, que ayudarían a la investidura. Aunque ambos no darán su brazo a torcer. El PNV lo dejaba claro: «El diálogo siempre es bueno, pero no hay margen para esa investidura».

¿Qué pasará entonces? Hay que tener en cuenta que para ser investido presidente, tanto Feijóo como Sánchez en el futuro, tienen dos oportunidades cada uno, ya que en cada sesión de investidura puede haber dos rondas de votación. En la primera, se necesita mayoría absoluta, pero en la segunda (que se celebra 48 horas después, el viernes 29) basta con tener más síes que noes. Es decir, si Feijóo llega a la segunda tanda, solo necesitará ser mayoría y da igual el número de votos.

En ese caso, lo lograría con una posible abstención también de PNV y Junts. Y tomaría posesión de su cargo en la primera semana de octubre. Aunque este escenario también resulta improbable.

¿Y si fracasa la investidura? Por el contrario, si su misión resulta fallida, los plazos se alargarán, ya que el Rey tiene dos meses para estudiar a otros candidatos. Dejando tiempo a los partidos para nuevas negociaciones, a la mayor brevedad propondría a otro candidato, como podría ser Pedro Sánchez. La fecha de esa investidura dependerá de la Casa Real.

Hay que comentar que no sería la primera vez en España que se produce una investidura sin éxito. Ya se han producido tres: dos de Pedro Sánchez y una de Mariano Rajoy. En las dos primeras se produjo una repetición electoral. En la fallida de Rajoy en 2016 se repitió justo antes de cumplirse el plazo. Y fue investido presidente con el apoyo de Ciudadanos y la abstención del PSOE.

¿Habrá nuevas elecciones? Si ningún candidato es investido durante ese periodo de dos meses que establece la ley (hasta el 26 de noviembre), tras la primera sesión de investidura de Feijóo, según lo dispuesto en la Constitución, se disolverían las Cortes y se convocarían unas nuevas elecciones generales que se celebrarían el 14 de enero de 2023.

Imagen: Sergio R. Moreno (GTRES)

En Xataka | Cómo consultar por Internet el programa electoral de los principales partidos



Fuente