Cómo Mantener Los Músculos En Buena Forma


Principales funciones del sistema musculoesquelético

Generación de movimiento

El sistema musculoesquelético está compuesto por el sistema muscular y el sistema esquelético. Dichos sistemas, al trabajar de forma conjunta, logran producir movimiento, estabilidad, forma y soporte para el cuerpo.

El sistema musculoesquelético, actúa sobre las articulaciones para producir movimientos voluntarios. A su vez, la musculatura lisa, ejerce movimientos involuntarios. Estos músculos controlan los órganos internos, destacando el sistema digestivo y cardiovascular.

El sistema muscular está formado por músculos esqueléticos y tendones, que son tejidos contráctiles especializados que se unen a los huesos y permiten el movimiento voluntario.

El sistema esquelético está formado por huesos, cartílagos, articulaciones, ligamentos y bursas, que proporcionan el marco, protección, producción de células sanguíneas y almacenamiento de minerales para el cuerpo.

Todo este conjunto sirve de base mecánica para los movimientos. Así, los huesos proporcionan una estructura rígida que sirve de palanca para que actúen los músculos. Además, las articulaciones que forman permiten diferentes tipos de movimientos, incluidos la flexión, extensión y rotación, entre otros.

Estabilización de las articulaciones

Según los expertos, los músculos y ligamentos ayudan a mantener la estabilidad de las articulaciones y evitan movimientos excesivos o no deseados que podrían causar lesiones.

A su vez, los huesos actúan como palancas que amplifican la fuerza generada por la contracción muscular. Las articulaciones actúan como fulcros que permiten diferentes tipos de movimientos en función de su estructura y amplitud de movimiento.

Por su parte, los cartílagos, ligamentos y bursas actúan como amortiguadores y estabilizadores. Esto evita la fricción y las lesiones de los huesos y músculos durante el movimiento.

Mantenimiento de la postura

Los músculos ayudan a mantener la posición erguida del cuerpo, y a resistir la fuerza de la gravedad, mientras que los huesos proporcionan un marco para el cuerpo y soportan el peso de los órganos y tejidos.

Los músculos que sostienen la columna vertebral, como los músculos posturales, ayudan a mantener las curvas naturales de la columna y evitan que las fuerzas de la gravedad nos tiren hacia delante o hacia atrás.

Estos músculos también nos ayudan a mantenernos erguidos y estables mientras caminamos, corremos o realizamos otras actividades.

Producción de calor corporal

Los músculos generan calor como subproducto del metabolismo, lo cual ayuda a mantener la temperatura corporal dentro de unos límites normales. Esto es especialmente importante cuando el cuerpo está expuesto a ambientes fríos, o cuando la temperatura corporal desciende por debajo del rango normal.

De acuerdo a los especialistas, los músculos voluntarios son los que generan mayor cantidad de calor. Ello ocurre, porque la contracción muscular requiere energía y produce calor como subproducto del metabolismo.

Otras funciones

Los huesos como parte del sistema musculoesquelético, cumplen también otras tareas. Dentro de ellas destacan:

  • Protección de los órganos vitales: esto incluye el cerebro, la médula espinal, el corazón, los pulmones y órganos reproductores.
  • Producción de células sanguíneas: entre ellas destacan los glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.
  • Almacenamiento de minerales: el tejido óseo almacena minerales, como el calcio y el fósforo, esenciales para diversos procesos metabólicos.

Clasificación general de los músculos

Según los expertos, los músculos se clasifican en voluntarios e involuntarios.

Los músculos voluntarios nos permiten realizar actividades físicas e interactuar con nuestro entorno. Se caracterizan por ser largos, cilíndricos, multinucleados y estriados.

Asimismo, se encuentran unidos a los huesos por tendones y pueden moverse mediante la voluntad consciente, permitiendo así, el movimiento de las partes del cuerpo y la locomoción.

Debemos señalar, que los músculos voluntarios demandan mucha energía y realizan contracciones rápidas y potentes. Sin embargo, se fatigan fácilmente y requieren descanso.





Fuente