Frases para disfrutar del verano


Ya es tiempo de disfrutar, de dejar atrás los problemas y, pandemia mediante, y con las distancias siempre ahí, toca pasarlo bien en épocas estivales. Os dejamos con las mejores frases para disfrutar del verano como nos merecemos. La playa, la piscina, el sol, las noches interminables y aquella sensación a niñez que nos encanta cuando estamos de vacaciones.

Mira estas frases, repásalas y empápate de las ganas de disfrutar con los tuyos, con unas medidas de prevención siempre por delante.

Tarde de verano; para mí estas han sido siempre las dos palabras más hermosas en mi lengua. Henry James. Son frases para disfrutar del verano

Tiempo de verano. Fue una canción. Fue una temporada. Me preguntaba si esa temporada alguna vez viviría dentro de mí. Benjamín Alire Sáenz

En verano las manos del viento mueven invisibles hilos en el aire, que unen las olas, los cabellos y los pensamientos. Fabrizio Caramagna

Si una noche de junio pudiera hablar, probablemente se enorgullecería de haber inventado el romance. Bern Williams

Verano: de noche el cielo se acerca a la tierra y sientes la hierba cosquillear las estrellas y notas musicales penden de cada árbol y las risas son tan numerosas que quisieras tener bolsillos donde ponerlas. Fabrizio Caramagna

¡Ojalá fuera siempre como ahora…! Siempre verano, siempre sin gente, la fruta siempre madura. Evelyn Waugh

En las vacaciones no tienes nada que hacer y todo el día para hacerlo. Robert Orben

El verano es la época del año en la que hace demasiado calor para hacer las cosas que no hacías en invierno porque hacía demasiado frío. Mark Twain

El sol está brillando, el clima es dulce. Dan ganas de mover los pies bailando. Bob Marley

Verano: el cabello se aclara. La piel se vuelve más oscura. El agua se calienta. Las noches se hacen más cortas. La vida se pone mejor. Anónimo

El verano es cuando las chicas van con los pies desnudos y sus corazones son tan libres como los dedos de los pies. Anónimo

Una y otra vez, incansablemente, el canto de las cigarras atravesaba el húmedo aire del verano, como una aguja penetra un grueso tejido de algodón. Yukio Mishima



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