Resbaladizo como la mantequilla

El Superintendente de Bancos, Alejandro Fernández, ha declarado en sus redes sociales que la institución que encabeza tiene la intención de desarrollar un proyecto que caracterice y sancione las estafas piramidales y permita tomar medidas preventivas sin tener que esperar a que suceda, pues por el momento no existen es un vacío legal en nuestro país y las autoridades solo pueden emitir advertencias a la población.

«Esquema Ponzi» es el nombre que se le da a este tipo de actividad y se llama así porque se le dio a un sistema utilizado en los años veinte por el italiano Carlo Ponzi consistente en obtener beneficios para un primer grupo de inversores a partir del dinero aportado por la nuevos, generando cada vez más ganancias si aumenta el número de personas reclutadas para unirse a ellos y ofreciendo rendimientos de las inversiones de los demás, hasta que se produce un colapso en el que muchos son engañados.

Dirigida a un público poco familiarizado con las finanzas, esta operación promete una alta rentabilidad en poco tiempo y sin documentación, y al estar generalmente vinculada a una empresa no registrada o con poca o ninguna regulación, los riesgos para los involucrados son muchos. .

El marketing es siempre directo, precisamente por esta falta de regulación. Nunca se ven empresas de este tipo publicitadas en periódicos, en la radio o en la televisión, sino que las promociones se hacen en lugares privados (como reuniones en domicilios), donde en un mecanismo “tú a ti” se lanza un gancho a los invitados. prometiendo beneficios espectaculares con una primera inversión. Hacer que funcione (siempre temporalmente) requiere la credulidad y el ingenio de personas cuyo razonamiento casi siempre se ve eclipsado por el deseo de ganar dinero rápido.

Y es verdad que muchos ganan. Por eso siguen surgiendo las pirámides y por eso tantos testimonios de gente feliz y emocionada, pero el precio moral y ético a pagar por los privilegiados es muy alto: la estafa de muchos otros que lo fueron, por las promesas de esta empresa. , en quiebra.
Si bien este aún no es el caso en República Dominicana, en muchos países del mundo esta práctica, también conocida como el “esquema piramidal”, está prohibida y penada por la ley.

Lo ideal, para evitar futuros arrepentimientos, es informarse bien antes de emprender cualquier tipo de negocio, contactar con buenos asesores financieros y, sobre todo, evitar todo aquello que prometa dinero fácil y sin esfuerzo.