Lamet se siente saludable en regreso a los Padres
SAN DIEGO – ¿Ha llegado el momento de empezar a soñar con Dinelson Lamet de nuevo? ¿Es finalmente el momento de comenzar a soñar con lo que ésta ya excelente rotación de los Padres podría lograr con un Lamet saludable en ella?
Respiracion profunda. La respuesta sigue siendo complicada. El regreso de Lamet al montículo en la derrota del martes por la noche por 2-1 ante los Piratas en Petco Park fue razón suficiente para estar optimistas. Pero sus dos entradas sin anotaciones también ofrecieron un recordatorio de que, al menos ahora mismo, el optimismo debe moderarse.
Los Padres activaron su eléctrico derecho de la lista de lesionados de 10 días a tiempo para comenzar el martes, casi el mejor escenario que pudieron haber imaginado cuando Lamet salió de su inicio hace dos semanas con tensión en el antebrazo derecho.
Lamet claramente no estaba en su mejor momento, y su velocidad de bola rápida, por lo general en los 90 altos, fluctuó a medida que avanzaba la salida. Permitió cuatro hits. Pero aquí está la parte importante: Lamet completó su salida programada sin signos externos de problemas en el brazo.
«Me sentí bien, afortunadamente», dijo Lamet. “Lo más importante es que me sentí saludable”.
Lamet hizo 30 lanzamientos, 21 de ellos strikes. Mezcló 11 deslizadores, su arma característica, y consiguió un puñado de abanicados con ella. Si hay un motivo de preocupación de su salida, es la velocidad de la bola rápida, que promedió 94 mph, 3 mph menos que su promedio de 2020.
Posteriormente, Lamet y el manager Jayce Tingler dijeron que estaban relativamente despreocupados por la caída de la velocidad. Ambos lo atribuyeron a la ausencia de dos semanas de Lamet del montículo.
«Él podría estar un poco oxidado por no lanzar», dijo Tingler. “Lo principal es que se sintió bien y fuerte al salir. Así que, en última instancia, es positivo».
Tingler señaló que espera que Lamet haga su próxima salida, aunque no fijó una fecha para ello. Parece probable que Lamet tenga una progresión lenta hacia la carga de trabajo de un abridor regular.
“Todo es un proceso”, dijo Lamet. “Tomaré todo día a día. Pero de nuevo, me sentí bien esta noche, y me siento bien ahora, así que asumiendo que todo va bien y me despierto bien mañana, entonces es cuestión de delinear un plan a partir de ahí».
Después de sufrir una lesión de un tendón en el codo en septiembre pasado, Lamet se había construido metódicamente y con extrema precaución esta primavera. Solo regresó al montículo para enfrentar a los Cerveceros el 21 de abril.
Pero Lamet salió de ese comienzo cuando su antebrazo se tensó. Teniendo en cuenta su historial de problemas en el codo, se sintió particularmente preocupado. Los médicos le habían dicho a Lamet el otoño pasado que al cancelarlo cuando lo hicieron, había aumentado sus posibilidades de evitar la cirugía Tommy John. Pero en su primer comienzo de regreso, su brazo estaba ladrando de nuevo.
Lamet no escapará de esos signos de interrogación en el corto plazo. Pero su partida en esa única salida de abril no fue el final de todo lo que algunos esperaban. Por un lado, la tensión del antebrazo de Lamet no coincidía en absoluto con los síntomas que había experimentado el otoño pasado.
«Fue completamente diferente a lo que sucedió el año pasado», dijo Lamet.
Los Padres insistieron en que esto era simplemente un pequeño revés, el primero de su tipo, para un lanzador que había sido tratado con extremo cuidado durante los últimos seis meses.
«Tan duro como ha trabajado y el plan de preparación que ha tenido… solo queríamos asegurarnos de que esté al 100%, sintiéndose bien», dijo Tingler. «Simplemente verificamos dos veces y [pasamos] por ese proceso, y ahora se siente muy bien».
En el momento en que los Padres colocaron a Lamet en la lista de lesionados, lo hicieron reanudar su programa de lanzamiento de inmediato. Ha lanzado al menos tres sesiones de bullpen en las últimas dos semanas, y no ha informado de los efectos de la lesión (aunque luchó contra un dolor leve de cuello en un momento, dijo Tingler).
No hace falta decir que un Lamet saludable sería de gran ayuda para un cuerpo de lanzadores de San Diego que ya está prosperando. Los Padres lideran las Grandes Ligas con una efectividad de 2.79 esta temporada. En 2020, Lamet registró una marca de 2.09 que se erige como la mejor efectividad de calificación para un abridor en la historia de la franquicia.
En la cima de la rotación de San Diego, Yu Darvish, Blake Snell y Joe Musgrove han estado a la altura de las expectativas esta temporada. Pero hay serios interrogantes al final. Adrian Morejón estará fuera por la temporada luego de la cirugía de Tommy John. Mientras tanto, Chris Paddack está en la lista de lesionados por razones no reveladas, y Ryan Weathers, quien relevó a Lamet el martes por la noche, experimentó síntomas de brazo muerto en su apertura más reciente la semana pasada.
De hecho, a pesar de lo bueno que ha sido el cuerpo de lanzadores de los Padres, la parte trasera de su rotación ciertamente podría beneficiarse de una sacudida. Es difícil imaginar uno mejor que un Lamet saludable. Ellos mantendrán los dedos cruzados.