Conversando con Guido sobre su amistad con Leonel (OPINION)


EL AUTOR es ingeniero agrónomo, abogado, escritor y político. Reside en Nueva York.

La RD necesita lideres nuevos sin historia de corrupción.  Los viejos políticos no saben hacer otra cosa que engañar y robar al pueblo. (parafraseando a Nayib Bukele)

 Preliminar

1 – A Guido Gómez Mazara, lo aprecio, respeto y admiro, por su valor, integridad y méritos personales.  Esos sentimientos se acrecientan y reafirman, por ser él, el hijo del legendario Maximiliano Gómez y de la heroína doña Carmen Mazara.  Si uno ama a una persona, lo natural es que también amemos a sus hijos.  Este es un sentimiento de gratitud espontáneo del alma, que surge del agradecimiento y compromiso que sienten los que aman a su patria, por aquellos que se han sacrificado por ella.     

 

2 – No obstante, ese amor no es patente de corso, que blinda a ese vástago del “Moreno” contra cuestionamientos y críticas.  Todo hombre o mujer que se decide por la política, tiene que estar en capacidad de aceptar las discrepancias, sin sentirse que está siendo irrespetado, despreciado u ofendido, sino, admitir, que ese disentir, expuesto con altura, es debate de las ideas para más y mejor democracia.   En ese tenor, se inscribe el presente artículo. Hecha esta aclaración vayamos al mismo. 

 

Conversando con Guido G. M., sobre su amistad con Leonel F.

3 – Pues bien…, en varias ocasiones oí a Hipólito Mejía declarar públicamente a todo pulmón y muy orondo, que Danilo Medina era su amigo, al cual le debía lealtad y gratitud.  En torno a esa confesión y a otras de Mejía, vertí varias críticas, las cuales han causado el encono de ese poderoso hombre y su grupo, en consecuencia, he sido marginado de un gobierno, del que, para que fuera la realidad que es hoy, puse vida, alma, corazón, intelecto y bienes.   

 

4 – En aquellas críticas a Hipólito, yo cuestioné: ¿cómo es posible, que si estamos combatiendo a Danilo Medina por corrupto, pongamos al frente de ese combate a un general que dice, que le debe “lealtad y gratitud”, al enemigo a combatir?  ¡Esto es una cuestión de lógica!

 

5 – Pero Mejía, no es solo amigo de Danilo Medina, sino también, canchanchán de la mayoría de los corruptos de la nación.  De modo, que por ello, no tiene reservas para reunirse en público o privadamente con Ernesto Quirino, Amable Aristy Castro, Francisco Javier García, Euclides Gutiérrez Félix, Félix Bautista y con cualquier otro de esos inmorales y traidores que han desfalcado al país con miles de millones de pesos.  

 

6 – En este espectáculo de la postmodernidad, ahora tenemos aspirando a la presidencia del país, al intelectual Guido Gómez Mazara, diciéndonos y mostrando con los hechos, que es amigo personal de Leonel Fernández.  Respecto a esta amistad, Guido ha revelado que se reúne con aquel “excepcional conceptualizador” en la casa de él.  En esos encuentros – revela Guido – que habla con el culto expresidente de muchos tópicos políticos y hasta de literatura. En estas referencias, Guido deja entrever su admiración, respeto y estima por el hombre que ha sido catalogado como uno de los presidentes más corruptos que en los últimos tiempos ha tenido nuestra República Dominicana y el resto de América Latina.  

 

7 – Ahora bien, del mismo Guido he escuchado, que los asuntos políticos no deben trascender a lo personal; que la política es una cosa y lo personal es otra; que no debemos dejar que lo político dañe una amistad.

 

8 – Estoy totalmente de acuerdo con Guido, siempre que el opositor político, no sea un delincuente, un gánster, un capo de la política, que tenga en su haber una historia de enriquecimiento ilícito, traicionando a la nación que le confió la responsabilidad de administrar los bienes del país.   

 

9 – La amistad y la buena convivencia debe primar en la discrepancia de las ideas (en las diferencias ideológicas), porque de eso se trata la democracia, pero jamás, debe haber amistad con quienes robando han traicionado al pueblo. Por ejemplo, en Europa y los Estados Unidos, los miembros de las diferentes facciones políticas mantienen relaciones cordiales, porque sus diferencias que son ideológicas, las discuten civilizadamente en el campo de las ideas, lo cual enriquece y perfecciona la democracia.

 

10 – Como es bien sabido, en las naciones más avanzadas que la nuestra, hoy no es posible encontrar de presidente, senador, diputado, fiscal, juez, etc., a alguien que tenga la historia de corrupción, que tiene la mayoría de nuestros funcionarios públicos.   Y si en alguno de esos países se encuentra a una persona culpable de corrupción, el mismo es enjuiciado, encarcelado, despojado de lo robado y se le condena a la muerte civil, es decir, el corrupto pierde sus derechos civiles y su personalidad jurídica, por ende, dicha persona queda inhabilitada de por vida para ejercer funciones públicas.

 

11 – El mismo Danilo Medina refirió a nuestro pueblo de esa cultura ética de los europeos y estadounidenses.  Los países nórdicos (Suecia, Noruega, Finlandia, Dinamarca) – nos dice Medina – especialmente Noruega, tienen un código de ética que no permite la corrupción. En Noruega no se acepta que un pariente se corrompa; si lo hace lo expulsan del seno familiar y los amigos lo sacan de su círculo social. Y cuando van a los lugares públicos, una persona que está señalada como corrupto, la gente se para y se va.  Cuando comencemos a actuar así, entonces tendremos una cultura de honestidad. Pero en República Dominicana, el que roba – dice Danilo – no quiere que le digan que es ladrón.  En la República Dominicana no tenemos una cultura de honestidad. 

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12 – La deshonestidad en nuestra RD, es tan macabra, que el mismo Danilo Medina y su familia, a despecho de su cacareada repulsa al robo y a su promesa de combatir la corrupción, por surrealista que parezca, ellos vinieron a ser grandes desfalcadores del Estado.  Ahora resulta, que ese mismo Danilo, haciendo honor a sus palabras, ante la acusación de que él y su familia se han enriquecido ilícitamente, no le gusta que le digan ladrones, y ante el estigma, que es un grito popular, muy altivo se defiende con el argumento, de que esas acusaciones responden a persecuciones políticas. Con iguales argumentos responden los demás peledeistas, que se han enriquecido robando a manos llenas los recursos del pueblo. Hasta Félix Bautista, el testaferro de Leonel, cuando ha sido acusado de enriquecimiento ilícito, se defiende con un recurso retórico, donde prima el concepto, persecución política motivada por envidia, por resentimientos y retaliación. Y Leonel, alardeando y reafirmando su honradez, tiene el tupé de decirle sin tapujos a los dominicanos, que la vida de jeque árabe que él se da, se la proporcionan sus amigos con generosas contribuciones económicas, porque según él, del Estado no tomó ni un centavo. (Cierto, no son centavos los sustraídos, sino, miles de millones de pesos y dólares).

 

Los ladrones del erario son traidores a la patria

13 – Traigo a colación la palabra traición, porque muchos reducen este término a la acción de delatar, a la labor de los soplones.  El diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, tiene las siguientes acepciones para la palabra traición: “Falta que se comete quebrantando la fidelidad o lealtad que se debe guardar o tener.  Delito cometido por civil o militar que atenta contra la seguridad de la patria. Alta Traición: traición cometida contra la soberanía o contra el honor, la seguridad y la independencia del Estado”.

 

14 – Como podemos deducir de la acepción que da la Real Academia de la Lengua a la palabra traición, el funcionario público que se hace rico robando lo que pertenece al pueblo, es un traidor.  Quien enajena lo del pueblo (por ejemplo, el regalo de nuestro oro a la Barrick Gold) a cambio de coimas o sobornos negociados, es un traidor a la patria.  Quien sobrevalora las obras del Estado y las compras y contrataciones, para acumular dinero, es un traidor a la patria.  Quien se une a los poderes fácticos contrarios a los intereses del pueblo, es un traidor a la patria. Quien corrompe la justicia, para buscarse impunidad contra los delitos cometidos, es un traidor a la patria. Quien es cínico, demagogo y mentiroso, es un traidor a la patria.  El impostor que cambia la Constitución para beneficio propio, es un traidor a la patria. Quien con la política de frontera abierta da pie a una inmigración excesiva y descontrolada, es un traidor a la patria.  El neoliberalismo es una estafa contra el pueblo, y quien lo impone, es un traidor a la patria. Y repito, quien hace fortuna robando al pueblo, es un traidor a la patria. 

 

Duarte y los traidores

15 – Si tomamos como referente el código anterior que tipifica la traición, entonces Leonel Fernández y todos los que se han enriquecido ilícitamente, son traidores a la patria. De ellos nos advirtió Duarte: los que roban lo que es del pueblo, para vivir en el lujo y el derroche, mientras la mayoría padece todo género de calamidades y precariedades, es una “facción miserable”, y sus integrantes son traidores a la patria, y mientras no se les escarmiente como se debe, los buenos y verdaderos dominicanos serán víctimas de sus maquinaciones”.

 

16 – Simón Bolívar, como Duarte, fue implacable con los que se dedicaban a dilapidar el erario, porque sabía del inmenso daño que este delito acarrea a los pueblos. Entonces, para conjurar el cáncer de la corrupción, “El Libertador” (como Duarte), también le dio categoría de tracción a la patria al hurto de los fondos públicos, en consecuencia, parte del decreto al respecto rezaba así: «todo funcionario público a quien se le convenciere en juicio sumario de haber malversado, o tomado para sí de los fondos públicos de 10 pesos para arriba, queda sujeto a la pena capital». Si ese decreto de Simón Bolívar, lo pudiésemos aplicar a los funcionarios dominicanos que se han enriquecido robando miles de millones de pesos del erario (principalmente a los funcionarios peledeistas de los 20 años), ¿Cuántos serían los fusilados?

 

17 – También, Duarte condenó al ostracismo a los saqueadores del Estado con su apotegma: “Con el traidor, ningún trato, aunque su traición nos beneficie.  De esta máxima se desprende, que para los duartianos ser amigo de Leonel y visitarlo para hablar de lo que sea, no es escarmiento, sino, apoyarlo, legalizarlo y reivindicarlo. Lo propio debería de ser – repudiarlo y aplicarle todo el peso de la ley – tal como hacen con sus corruptos los países nórdicos referidos por Danilo Medina.

 

18 – De este cuadro derivo, que de estar vivos, patriotas como Duarte, Américo Lugo, Pedro Francisco Bonó, Ulises Francisco Espaillat (mi tatarabuelo), y toda la gente de esa estirpe, jamás tendrían amistad con personas como Leonel.  Y si Juan Bosch estuviera vivo, estoy seguro que el repudio hacia Leonel fuera tal, que no le permitiría que pise ni el umbral de su casa.

 

El cristianismo y los ladrones

19 – No robarás, es uno de los diez mandamientos del cristianismo. Y del soborno dice:  no pedirás ni recibirás sobornos, porque el soborno ciega los ojos del sabio y pervierte las palabras del justo” (Dt 16:19b). 

Ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los difamadores, ni los estafadores heredarán el reino de Dios.

No os juntéis con ninguno que, llamándose hermano, fuere fornicario o avaro, o idólatra, o maldiciente o borracho, o ladrón; con el tal ni aun comáis” (1 Cor. 5:11).

El que se asocia con un ladrón aborrece su propia vida.

Definitivamente, robarle al pueblo, es faltarle a Dios. Traicionar al pueblo, es traicionar a Dios.

 

A modo de conclusión

A – Mi desacuerdo y critica a la amistad de Guido con Leonel se basa en el ideario de Duarte, y también, paradójicamente, en el “ideario” de Danilo Medina, expuesto magistralmente cuando él habló del repudio de los ciudadanos de los países nórdicos hacia sus corruptos.  También, mi reprobación a esa camaradería, empatiza con todos los que sustentan que a los corruptos hay que repudiarlos, y más cuando estos han alcanzado el grado de depravados. Además, con mi oposición a esa confraternidad, busco proteger a este hijo de doña Carmen Mazara del mal de ojo, o del anatema y maleficio, que pueden recaer sobre él por causa de relacionarse con un simulador como Leonel.  

 

B – Disertando sobre dinero y poder, se habla del sutil encanto de los millonarios, que el pobre es odioso aun a su amigo, pero que son muchos los que aman al rico, porque estamos en un mundo donde se valora el tener, no el ser.  Poderoso caballero es don dinero, escribió Francisco de Quevedo.  De aquella publicación poética han transcurrido más de 400 años, y su esencia conceptual, aún tiene toda su vigencia. Los demuestran todos los que se han hecho millonarios en nuestra RD y en otras partes del mundo.

 

C- De estos millonarios, por ejemplo, Félix Bautista es un todopoderoso que goza de poder e impunidad; también, por las mismas razones lo es Leonel; y su encanto para el sector ignorante de la población, es tal, que aún con un prontuario delictivo descomunal que incluye el de traidor a su patria, es querido por aquellos miles y miles de iletrados, que lo consideran la opción de poder más idónea para que venga a resolver los problemas del país, que dicho sea de paso, en su mayoría, fueron creados o agravados por él en sus doce años de gobierno de corrupción depravada. 

 

D – En este contexto, la cuestión es, que en el plano de lo ético, si hemos criticado a Hipólito por su “canchánchaneria” con los corruptos, incluso con Ernesto Quirino, a quien ha visitado en su propia casa,  y si también le he censurado a nuestro presidente su camaradería y relación de Estado con Manuel Estrella, entonces, es de lugar, que le reprochemos a un revolucionario de nuestro PRM que aspira a presidente de la República, que se relacione con un corrupto y corruptor como Leonel, que en lo de inmoral y traidor a la patria, no es diferente al convicto narcotraficante, Quirino Ernesto Paulino Castillo.  Respecto a esto, el mismo Quirino ha dicho: “Leonel es más delincuente que yo”. Y no lo dice por decirlo; no olvidemos, que la planta eléctrica de FNGLODE, la compró ese ex contribuyente económico de Leonel.

 

F- A todos los admiradores del engendro político llamado Leonel Fernández, y al país en general, solo me resta decirles: Cualquier apoyo que se le brinde a este camaján, que de manera directa o indirecta contribuya a sus planes de regresar al poder, comete un crimen de lesa patria.  A Leonel ya lo conocemos. En sus doce años de gobierno, fue corrupto y corruptor. De él volver al poder, haría lo mismo que antes, pero con más fe.  Lobo viejo pierde el pelo, no las mañas.  El hombre como el alacrán o la serpiente obedece a su naturaleza. Trata de salvar al alacrán de la tormenta transportándolo en su lomo, y veras como en medio de rio en creciente, te inyectará su veneno.  Por igual, compadécete de la serpiente que en la intemperie de un invierno casi se muere de frio, y para salvarla, abrígala y dale calor en tu pecho, y veras como también te inoculará su veneno.   Por igual, de Leonel volver al poder, responderá a su naturaleza, tal como lo hace el alacrán y la serpiente, en consecuencia, el Leonel que nos ocupa, volverá a hacer contra el pueblo, lo mismo que hizo en sus doce años ¡saquear el erario!, pero esta vez, con más fuerza y maestría, porque tendría más experiencia, y más compromiso con saciar la codicia de él y los suyos.       

 

F – ¡Ciudadanos de la República dominicana, no olvidéis, que el verdadero corazón de un hombre, por sus hechos lo conoceréis! ¡Que vivimos en el tiempo de la generación de víboras, de alacranes y de los falsos profetas! ¡Leonel, es víbora, alacrán y falso profeta. Leonel, no es un hombre de Dios.

El que tenga oídos, que oiga…, para que después, los responsables del ascenso al trono de ese esperpento político (en caso que fuere), no tengan que ir a llorar al muro de las lamentaciones las desgracias de nuestro pueblo, por causa de tan imperdonable yerro.  



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