Una profesora que sufrió una trombosis tras recibir la vacuna de AstraZeneca muere tras varios días en coma


Los efectos secundarios de las vacunas contra el coronavirus son la principal preocupación de los sanitarios que las administran. Las dosis de AstraZeneca inyectadas en varios pacientes registraron varios trombos, que preocuparon a los países e incluso provocó su suspensión durante un corto periodo de tiempo. 

Uno de estos casos fue el de Augusta Turiaco, de 55 años. Era profesora de música en un colegio público y a última hora de la noche de martes se declaró en el hospital su muerte cerebral. Durante días había estado en coma y en la unidad de cuidados intensivos, en un intento por salvar su vida.

Como profesora de un colegio había recibido la administración de la vacuna AstraZeneca el 11 de marzo, y desde ese día comenzó a empeorar. Empezó a sufrir un persistente dolor de cabeza, que pronto se transformó en algo más, con una trombosis generalizada, hasta su trágico final, según informa el diario Stampalibera.

En plena polémica por los casos de trombosis como el de la profesora, la empresa farmacéutica AstraZeneca y la universidad británica de Oxford han sido autorizadas a cambiar el nombre de su vacuna contra la Covid-19, que pasa a llamarse Vaxzevria, según informa la Agencia Europea de Medicamentos (EMA). El cambio de nombre no afecta a su composición, pero llega en plena polémica por las trombosis detectadas en personas vacunadas con este suero



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