Una doctora regresa a su casa después de vivir un año en una caravana para no contagiar a su familia de la Covid-19
La doctora Tiffany Osborn tomó una difícil decisión al comenzar la pandemia de coronavirus y encontrarse trabajando desde un hospital: mudarse a una caravana para no contagiar a su familia.
Su trabajo en la UCI del Barnes-Jewish Hospital, en Estados Unidos, durante estos últimos meses, hacía que pusiera en riesgo la salud de su familia, por lo que no dudó en dejar de vivir con ellos bajo el mismo techo.
Es ahora cuando esta sanitaria ha vuelto a su vivienda con su marido y sus hijos, de 19 y 15 años, al lograr la inmunidad ante la Covid-19 tras vacunarse.
«Solo queremos decir que estamos muy agradecidos y nos sentimos muy bendecidos de haber vuelto a casa con mi familia», confesó ella misma a CNN. «También nos sentiríamos negligentes si no reconociéramos el hecho de que muchas personas no llegaron a casa con los suyos. Solo queremos que sepan que estamos pensando en ellos».
Son innumerables los médicos que han escogido esta opción para evitar poner en riesgo a sus seres queridos, comunicándose desde fuera del vehículo y manteniendo la distancia de seguridad, o viviendo en otra casa.
«No pensaba que iba a estar en la caravana durante un año, eso seguro», reconoció.