Un anciano, una pinta y su despertador: la foto que retrata las medidas ‘anticovid’ de Irlanda que se ha vuelto viral
Un hombre se toma su pinta de ‘Guiness’ mientras cronometra con un despertador el tiempo que le queda antes de que tenga que abandonar el local, una vez haya superado la hora y 45 minutos que se ha establecido como límite de consumición en los bares de Irlanda.
El momento fue capturado por el responsable del pub de Galway en el que se encontraba el anciano; y refleja cómo, en cada país, los ciudadanos van adaptándose -a su manera- a las medidas y restricciones establecidas por el avance de la pandemia de coronavirus.
«El hombre era muy consciente de las restricciones de tiempo vigentes y preeguntó si tenía tiempo para otra pinta mientras señalaba a su reloj», relatan en la cuenta oficial en redes sociales del pub ‘McGinn’s Hop Store’.
Según ha contado el dueño del bar a medios locales, la imagen ha impactado y tocado la fibra sensible de muchas personas que incluso se han ofrecido a comprarle una pinta a John Joe Quinn, el ya famoso octogenario. Otros, se han valido de la fotografía para criticar las medidas del gobierno que consideran excesivas. «Al diablo con los malditos pubs, la salud es más importante. Quiero decir, si el virus se propaga nuevamente, todos estaremos en problemas», declaró el anciano en una entrevista para un medio irlandés.
En Irlanda, una de las restricciones adoptadas por el Gobierno para contener los contagios establece que los clientes que vayan a los pubs y tengan el objetivo de consumir alcohol, deben consumir una comida de al menos nueve euros para ser atendidos. Además, solo disponen de una hora y 45 minutos para terminarse lo que hayan pedido, periodo de tiempo tras el cual deben abandonar la mesa.
Esta medida se aplica, de momento, solo para los pubs que sirvan comida, tras haber podido reabrir a finales de junio. Aquellos que únicamente venden bebidas alcohólicas, no obstante, todavía están obligados a permanecer con las persianas bajadas -en un principio hasta el 21 de septiembre-, en lo que es ya el bloqueo más largo de Europa.