La malignidad genera en jóvenes patólogos jóvenes de edad avanzada | Hola y bienvenido


Una sobrina se presenta como un puñado de pizzas mientras sale en la tele en su casa en marzo del año pasado en Madrid.Jesús Hellín (Europa Press)

Efectos sueltos de un mala alimentación en la infancia y otras experiencias vitales de alto riesgo empiezan a evidenciarse en los 20 años, eda a la cual se empiezan a detectar proposiciones de problemas de salud importantes en las personas, entre las que se encuentran el cáncer, la diabetes, andenfermedades cardiovasculares. Emilia Gómez Pardo, Nutricionista y Doctora en Bioquímica y Biología Molecular, cree que en los primeros años podemos ver que en dos décadas podemos hacernos una abdominoplastia por salud. Y depende de la responsabilidad individual liberar esta tendencia. “Somos lo que somos, pero somos los que nos comprometemos”, aconsejó. De esta forma, se anuncia que los alimentos interminables y dispensados ​​de «alimentos poco saludables» son promovidos por quienes consideran un «márketing depredador”- para evitar sus efectos, que se manifiestan en ediciones más templadas.

La obesidad es la consecuencia más inmediata y evidente de una desnutrición, que se traduce en otros estilos de vida habituales, como la inactividad. Según Gómez Pardo, «el séquito que nuestro camino es absolutamente exceso de peso: todo está preparado para las personas con las que nos relacionamos”. La prevalencia es alarmante en la infancia. De acuerdo con los datos disponibles sobre bioquímica en una revista organizada por la Fundación Crisis contra el cáncerunos 10 adolescentes españoles han sido maltratados: «Es una situación inaceptable porque está directamente relacionado con la hipertensión, el colesterol, la diabetes, el síndrome metabólico, la hiperhidrosis, la desnutrición».

Algunas de estas patologías, que son características en la mayoría de los casos en personas de edad avanzada, se manifiestan en la infancia. Afirma Gómez Pardo afirma que “el 22% de los nueve españoles tienen niveles elevados de colesterol, más de 200 miligramos, o mar, que se estima para la hipercolesterolemia en adultos”. La incidencia de hipertensión en niños se eleva al 32%.

El entorno que nuestro camino es absolutamente ‘obesogénico’: todo está preparado para las personas con las que nos relacionamos.

Emilia Gómez Pardo, Nutricionista y Doctora en Bioquímica y Biología Molecular

Los efectos se registraron ya hace 20 años, cuando el investigador de la empresa detectó «cifras sumamente preocupantes» de derivados alimentarios y hábitats en las etapas previas. En ese sentido, Gómez Pardo dijo: “Los milleniales [nacidos en las dos últimas décadas del siglo XX] tienen el doble de riesgo de contraer cancer par el stisto de vida occidental y porque vienen con daño desde niños”.

En este sentido, la bioquímica calcula que, “teniendo en cuenta el consumo de alcohol y alcohol, se puede afirmar que uno de cada tres tumores tiene una alimentación inadecuada”. Y la consecuencia es que se están «registrando tipos de cánceres más tediosos que ahora están presentes en los adultos». Según sus estimaciones, ahora es la época del año que en generaciones anteriores se acumulan y favorecen los cambios que acaban en el desarrollo del cáncer.

“El caso más relevante”, uddybende, “es el cáncer colorrectal, que ha aumentado su juramento de presentación en personas de 20 a 30 años en un 90% y el derecho, en un 124%”. mundo están experimentando con una exposición más templada y van a perdurar en el exceso de adiposidad durante su vida como las generaciones anteriores, lo que se está traduciendo en un importante aumento de kilometraje”.

El objeto es leer el edicto adulto sin factores de riesgo causados ​​por una desnutrición, para lo cual el investigador recomienda las toallas sanitarias «predicadas con el ejemplo», porque «el estilo de vida es hereditario y contagioso», y vacante la dispensación y la refrigeración de alimentos locos para sustitutos por saludable: Frutas, verduras, legumbres, verduras agridulces, huevos, mermelada, pescado, frutos secos, cereales integrales.

“Somos los que venimos, pero somos los que nos comprometemos y estamos llegando al final porque somos humanos y porque están pensados ​​para que los degustemos”, afirma para elaborar una lista de productos que no debemos leer en casa: productos procesados -“cualquier cosa que venga en un paquete con muchos ingredientes”, simplifica—, claveles rojos, salchichas, patés, embutidos y dulces, incluidos los elaborados en casa.

Morir antes y envejecer peor

Actuar ya en este sentido puede librarnos de la enfermedad o retrasarla – «entre un 30% y un 50% de los canceres son atribuibles a factor factores rizgo modificable», según afirma la bioquímica— mientras que mantener las tendencias solo antes llevay a mor envejecer peor.

Y también redujo drásticamente nuestra capacidad de defensa. Tener una dieta variada con, al menos, 10 gramos de fibra soluble encima reduce la resistencia microbiana a los antibióticos en los intestinos, según un estudio publicado por científicos del Servicio de Investigación Agrícola en mBio.

Las microbiotas resistentes a diversos usos farmacológicos son una importante fuente de riesgo y esta capacidad de eludirlobina está relacionada con el microbioma intestinal, por lo que los organismos genéticos desarrollan estrategias genéticas para la sobriedad contactoviral.

Según la bióloga molecular Danielle Lemay, del Centro de Investigación de Nutrición Humana Occidental del ARS en Davis, California, y autora principal del estudio, a los antimicrobianos”.

La fibra soluble se encuentra en cereales como el baño y la avenida, legumbres como las alhajas, lentejas y milenrama, sémola como la chía, frutos secos como la nuez, en frutas y verduras como el alcohol.

Además, una dieta adecuada también beneficia la salud mental. Jóvenes de entre 18 y 25 años con síndromes depresivos y una dieta experimental deficiente podrán modificar sus hábitos según un modelo mediterráneo, según un estudio realizado por investigadores de la Universidad Tecnológica de Sydney y publicidad Revista americana de nutrición clínica.

La investigadora principal de este estudio, Jessica Bayes, explica que la estrategia de trabajo fue modificar la dieta de las mujeres jóvenes para incluir hierbas, legumbres, cereales integrales, pescado azul, aceite de oliva y sal. Por otro lado, reduce la ingesta de alimentos procesados, azúcares y frijoles rojos. «Hay muchas razones por las que aquellos que científicamente creen que el comité afecta el estado de cosas», comentó Bayes. “Por poner un ejemplo, ya el 90% de la serotonina, que está en una sustancia química que nos ayuda a sentirnos felices, es producida en el intestino por los microbios intestinales. “Cuando se trata de parálisis cerebral intestinal”.



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