La historia de Loretta Harmes, la joven chef que no podrá volver a comer

Loretta Harmes es una joven británica de 29 años que se dedica a su gran pasión: la cocina. Esta chef tiene su propia cuenta de Instagram dedicada a sus recetas, pero ella tiene una peculiaridad: no puede comer.

La BBC ha recogido en un reportaje su historia de superación. Loretta sufre el síndrome de Ehlers-Danlos (HDS), un trastorno genético que se puede manifestar de varias formas y que en su caso, le afecta al estómago: está parcialmente paralizado y no puede vaciarse correctamente, por lo que no puede comer ni beber.

Los problemas de salud de Loretta vienen de lejos. Cuando tenía 15 años sufrió anorexia, y a partir de los 19, empezó a sufrir terribles dolores de estómago. «Las cosas empezaron a empeorar dramáticamente. No podía comer o ir al baño en absoluto y durante los cinco años siguientes se convirtió en una pesadilla de la que no podía despertarme», explica.

Los médicos achacaban su estado a la anorexia, por lo que los tratamientos no funcionaban. Llegó a pesar 25 kilos. Finalmente, los médicos dieron con su rara enfermedad.

Hace seis años, Loretta comió por última vez. Desde entonces, se alimenta de nutrición parenteral total (TPN), es decir, que está conectada 18 horas al día a una bolsa con nutrientes que van directamente a su sistema circulatorio.

«La TPN recuperó mi peso y energía. Fue agradable volver a vestir ropa normal y no tener que comprar en la sección para niños», dijo Loretta, que hasta ese momento permanecía la mayor parte del tiempo postrada. Sus huesos se habían debilitado en extremo y llegó a desaparecer la menstruación.

Gracias a esta mejoría, Loretta puede dedicarse a su pasión: cocinar. «La razón por la que no me preocupa no poder comer es porque estoy muy aliviada de no tener dolor tras tantos años», explica.

«Lo que me da placer es cocinar. Estar en la cocina es un espacio creativo real para mí. Si estoy ansiosa o preocupada, en cuanto cocino todo se va porque me concentro en el plato que estoy haciendo», dice.



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