imputan a Suu Kyi por incitación y limitan la retirada de dinero en efectivo


La situación de Birmania cada día es un poco más compleja. Desde el golpe de estado por parte de los militares el pasado 1 de febrero, se han sucedido las protestas y los duros enfrentamientos con la policía por parte de centenares de miles de ciudadanos, que piden la libertad del gobierno electo democráticamente, entre las que se encuentra la líder Suu Kyi

Las protestas han continuado este lunes, donde centenares de birmanos volvieron a salir a las calles para manifestar su rechazo contra el golpe de Estado y tras la sangrienta represión policial de la víspera, que dejó una veintena de muertos.

Algunas personas en primera línea se protegían con cascos de plástico y rudimentarios escudos para desafiar un día más a las autoridades, que el domingo dispararon munición real en al menos siete ciudades contra el movimiento pacífico de oposición.

«Devolvednos la democracia» o «Abajo el régimen militar», son algunas de las proclamas que entonan los manifestantes, quienes prometen «luchar hasta el final», conforme a los vídeos de medios locales que retransmiten en directo las protestas.

Además, una de las noticias que se ha podido conocer es que las autoridades de Birmania han presentado este lunes cargos por incitación contra la antigua líder ‘de facto’, Aung San Suu Kyi, y el expresidente Win Myint, detenidos tras el golpe de Estado perpetrado por el Ejército del país asiático el 1 de febrero, según ha recogido el diario birmano The Irrawady.

Los nuevos cargos han sido presentados en el marco de una comparecencia por videoconferencia de Suu Kyi ante el tribunal que juzga su caso, sin que por el momento el Ejército haya esclarecido dónde se encuentra desde su detención.

Sus abogados han resaltado que Suu Kyi parece estar «en buen estado de salud» y ha pedido durante la vista ver a su equipo legal, tal y como ha recogido la cadena de televisión británica BBC. 

Por otro lado, El Banco Central de Birmania ha limitado a partir de este lunes la retirada de dinero en efectivo de sus bancos y cajeros automáticos. Según una carta enviada a todos los bancos del país y publicada en Twitter, ningún ciudadano puede retirar más de dos millones de kyat (1.173 euros) al día de su cuenta bancaria a partir de este lunes 1 de marzo, mientras que las empresas tendrán derecho a sacar hasta 20 millones de kyat (11.730 euros) a la semana.

Con esta decisión, el banco pretende «facilitar la transición hacia una economía digital», al reducir el uso de efectivo entre las agencias gubernamentales y la población general. Por otro lado, los reintegros de efectivo de los cajeros automáticos se limitan a 500.000 kyat al día (293,42 euros), la mitad del límite anterior, fijado en un millón de kyat. Así, la medida se toma en un momento de excepción tras el golpe, con las operaciones de casi todos los bancos suspendidas, con la excepción del estatal Myanmar Economic Bank.

Por último, el relator especial de Naciones Unidas para Birmania, Tom Andrews, condenó la violencia y reclamó una acción más severa contra el Ejército, entre ellas sanciones específicas y coordinadas contra los responsables del golpe de Estado y contra los negocios de los militares, además de un embargo global de armas contra el país.

El Ejército justificó la toma de poder por un supuesto fraude electoral en los comicios de noviembre, donde observadores internacionales no detectaron ningún amaño, en los que arrasó la Liga Nacional para la Democracia, el partido liderado por Suu Kyi, como ya hiciera en 2015.



Fuente