Finlandia, última muestra del poder de la ultraderecha en Europa

LORENA GAMARRA / GRÁFICO: CARLOS GÁMEZ

El líder socialdemócrata, Antti Rinne, celebra la victoria en las elecciones de Finlandia.

Las elecciones en Finlandia, donde la formación de ultraderecha Verdaderos Finlandeses se ha quedado a sólo dos décimas de la victoria, son el último ejemplo del auge que está viviendo la extrema derecha en todo Europa en los últimos años.

El socialdemócrata Antti Rinne ha conseguido el 17,7% de los votos y 40 escaños, frente al 17,5% y 39 escaños de la formación de Jussi Halla-aho. Éste llegó a la dirección del partido en 2017 y sus promesas para reducir la inmigración e implementar normas de asilo más estrictas, entre otras, han elevado la popularidad de los Verdaderos Finlandeses en el país.

La formación de Halla-aho ha vivido un enorme crecimiento desde su llegada. Con un perfil más radical, dio un giro a la ultraderecha tras dos años en una coalición de gobierno que supuso recortes sociales y una gran crisis de migración en el país.

Como en Finlandia, los partidos ultraderechistas superan el 15% de los votos en no pocas regiones europeas, entrando incluso en gobiernos o siendo su apoyo decisivo. En cinco de ellos, el respaldo supera la barrera del 20%.

Marine LePen en Francia o Matteo Salvini en Italia son dos de las caras más conocidas de la ultraderecha pero no son las únicas. Presentes desde hace un siglo, estos partidos han resurgido en los últimos tiempos y cuentan cada vez con más voz y más apoyo.

Polonia es el caso más claro. Tras las últimas elecciones de 2015, el partido Ley y Justicia (PiS) gobierna en la actualidad tras conseguir el 37,6% de los votos, pero también la Liga Norte de Salvini consiguió entrar en el Ejecutivo italiano en 2018 gracias a una coalición con el Movimiento 5 Estrellas. El apoyo no fue tan abrumador, pero también tuvo una gran representación (17,6%) que le permitió entrar en el Gobierno y ocupar la vicepresidencia.

También en Suiza, el Partido del Pueblo Suizo (SVP) consiguió en 2015 el respaldo de casi un tercio de los votantes, un 29,4%, cifras similares a las obtenidas por Partido Liberal de Austria (FPO) en 2017, que reunió el 26%.

Causas del auge

La crisis de refugiados entre otros factores ha sido el detonante del crecimiento de estos partidos, cuyos discursos están basados en el proteccionismo con mensajes en contra del terrorismo islamista y de la inmigración. Mensajes que también se escuchan en nuestro país de la mano de Vox y que están calando en gran parte de la sociedad.

En este sentido, la tendencia ascendente de la ultraderecha en toda Europa también se puede ver reflejada en España y la cita del próximo 28 de abril será clave. El partido que lidera Santiago Abascal irrumpiría con fuerza en el Congreso de los Diputados tras las elecciones generales, según las encuestas, que ya sitúan a Vox como quinta fuerza nacional y le otorgan entre 29 y 37 escaños, según los datos del último barómetro del CIS, y tendría representación en 22 provincias.

Ya en las elecciones andaluzas del pasado mes de diciembre, Vox dio la sorpresa con sus 12 escaños, que le dieron un papel decisivo para la formación de gobierno y que supuso un anticipo del crecimiento que puede tener la ultraderecha a nivel nacional.

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