Finales WTA 2021: Garbiñe Muguruza: “Queda otro partido. No quiero soltarme ”| Deportes


Garbiñe Muguruza prepara un saque ante Paula Badosa, durante las semifinales de la Copa Maestros, en Guadalajara (México).ULISES RUIZ (AFP)

Como en los días previos al torneo, México se rindió ante Garbiñe Muguruza y Paula Badosa, sin importar si ambas eran rivales esta vez. La cancha de Akron, en Guadalajara, estuvo dividida por momentos entre el ex número uno del mundo y el reciente campeón de Indian Wells. «¡No te rompas, Paula!» Gritaron desde la grada al catalán. «¡Vamos, Garbi!» Gritaron desde otros sectores. El pueblo mexicano, reacio a guardar silencio por querer abrazar a las españolas, fue testigo del histórico paso a la final de Muguruza y el tenista intenta responder al apoyo con buenas palabras.

«Es el ambiente más emotivo, es el mejor Masters para jugar una final», responde EL PAÍS tras conseguir la victoria, mientras camina por una de las gradas del complejo.

Muguruza usa un chándal completamente negro, zapatillas blancas y un reloj dorado en su muñeca izquierda. Ella está feliz pero contenida. La española dice que tiene trabajo que hacer y que a pesar de haberse convertido en el segundo jugador nacional en llegar a la final de la Copa del Profesor -después Arantxa Sánchez Vicario, en 1993-, la obra está inconclusa.

“Yo digiero bienestar histórico para España. Tengo una buena oportunidad mañana [por este miércoles] Y pase lo que pase, me voy a ir muy feliz de haber llegado a la final. Pero ojalá pueda ser la primera española en ganar el trofeo ”, transmite a este diario.

“Juego a juego siento que mi juego, mis tiros y mi servicio han mejorado. Ha sido el mejor partido aquí ”, precisó la finalista antes de que interviniera su entrenador. «La verdad es que fue un muy buen partido, muy inteligente para Garbiñe. Hizo un partido agresivo, se mantuvo paciente, sirvió perfecto y no la perdió. La altura en Guadalajara». [1.566 metros sobre el nivel de mar] Es un tema sobre el que trabajar, pero a eso es a lo que llegamos. Tuvimos mucho tiempo para trabajar en eso y se refleja en la cancha ”, explica Conchita Martínez, campeona de Wimbledon 1994 y en su día número dos de la clasificación.

Jugar un Masters en México, sede alternativa a Shenzhen (China), y llegar a la final es «un cóctel supermotivador» para Muguruza, en el umbral de una jornada histórica en la que se enfrentará a la estonia Anett Kontaveit (6-1 , 3-6 y 6-3 a la griega Maria Sakkari). “Quiero concentrarme en mí mismo, sabiendo que va a ser difícil. Aquí no hay favoritos, queda otro partido y no me quiero soltar «, subraya el cinco del mundo, que subirá a la tercera posición y tiene ante él» una oportunidad única «de lograr un título que le daría diferenciarla y agregar una bonificación a su historial.

Mientras tanto, Badosa se expresaba desde el desamparo. “No he disfrutado de nada. No he podido competir, no sé qué pasó. En mi caso, no he estado al nivel ”, mencionó el catalán en la sala de conferencias. “Puedes ganar o perder, pero me molesta no poder competir. La ansiedad se apoderó de mí. Me ha costado calmarme y concentrarme ”, lamentó.

“Tengo un nivel o dos para mejorar. He mejorado mentalmente, pero quiero seguir aprendiendo. Me quedo con el hecho de que este año me he dado cuenta de que he sido más fuerte de lo que pensaba ”, completó tras el partido, jugando con el sol golpeando de maravilla el asfalto mexicano.

«Estoy muy orgullosa de Paula y muy impresionada, se lo merece todo», elogió Muguruza, que ha pasado de menos a más en Guadalajara y que domina los cruces particulares con Kontaveit (3-2), a quien superó hace tres días, cuando su continuidad en el torneo se jugó por cara o cruz. Cuando llega el momento de empujar, Muguruza se multiplica.

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