El Papa pide que no se juzgue a los pobres – el Nacional

El Papa Francisco condenó el domingo a las sociedades que pasan con indiferencia junto a los pobres y a menudo los juzgan en lugar de ayudarlos, durante una misa en la Basílica de San Pedro a la que asistieron 2.000 personas indigentes.

Durante su homilía, Francisco también criticó la “creciente indiferencia” hacia los pobres, de quienes dijo que a menudo se ven empujados a la pobreza debido a las injusticias.

Desde que comenzó su papado en 2013, ha utilizado su tribuna para llamar la atención sobre aquellos que viven al margen de la sociedad. La Iglesia Católica dedicó el día a los pobres del mundo.

“Somos parte de una historia marcada por la tribulación, la violencia, el sufrimiento y la injusticia, siempre esperando una liberación que parece no llegar nunca”, dijo Francisco.

«Los más heridos, oprimidos e incluso aplastados son los pobres, los eslabones más débiles de la cadena». Al dirigir su atención a los pobres, señaló, la Iglesia «nos pide que no nos apartemos, que no tengamos miedo de mirar de cerca el sufrimiento de los más vulnerables».

El pontífice lamentó «la pobreza a la que muchas veces se ven obligados, víctimas de la injusticia y la desigualdad de una sociedad desechable que los pasa a toda prisa sin verlos y los abandona a su suerte sin escrúpulos».

El Papa no mencionó específicamente el impacto del cambio climático en los pobres, quienes podrían verse obligados a abandonar sus hogares debido a sequías e inundaciones.

Sin embargo, Francisco agregó que “a menos que nuestra esperanza se convierta en decisiones concretas y gestos de preocupación, justicia, solidaridad y cuidado de nuestra casa común, no se aliviará el sufrimiento de los pobres, se hará la economía del despilfarro que los obliga a vivir en los márgenes. no se transformarán, sus esperanzas no volverán a florecer ”.

Francisco instó a la gente a mejorar el mundo «compartiendo el pan con los hambrientos, trabajando por la justicia, levantando a los pobres y restaurando su dignidad».

Entre los invitados a la misa estaban los trabajadores de caridad, así como las personas a las que ayudan. Francisco pidió llevar esperanza al mundo a través de «la ternura con los pobres, sin juzgarlos».

Por FRANCES D’EMILIO