Ataque Kongsberg: ejecutante de asesinatos con arco y flecha en Noruega sospechoso de radicalización islamista | Internacional
La policía está investigando los motivos que llevaron a un hombre de 37 años a matar a cinco personas y lesionar a otras dos en Kongsberg, sureste de Noruega, el miércoles por la tarde. El hombre, que asesinó a las víctimas con arco y flechas, es un converso al Islam que ya estaba en el radar de las autoridades por representar un peligro de radicalización, según informó este jueves la policía regional.
El hombre, de nacionalidad danesa, utilizó otras armas en el ataque, según la policía, que no ha proporcionado más detalles. Actuó solo. Las víctimas mortales, cuatro mujeres y un hombre, tenían entre 50 y 70 años. Las autoridades están estudiando el estado psiquiátrico del detenido, quien ya había sido detenido en otras ocasiones por amenazar con matar a sus familiares.
La Policía ha asegurado esta tarde que lo ocurrido en Kongsberg «parece un acto de terrorismo», pero en un comunicado de prensa agrega que la investigación, liderada por el distrito policial Sureste, «aclarará con mayor detalle los motivos del incidente». El nivel de amenaza en Noruega todavía se considera moderado, agrega. la noticia. La Policía asegura que está investigando si lo sucedido puede inspirar a otros a cometer actos de violencia y agrega que por el momento «no tienen información de que sea así».
El ataque tuvo lugar en varios puntos del municipio de Kongsberg, de 28.000 habitantes, ubicado a unos 84 kilómetros de la capital, Oslo. Según varios medios locales, el hombre comenzó a disparar flechas desde el interior de un supermercado de la cadena Coop Extra. Luego recorrió varias calles disparando a más peatones antes de ser arrestado, poco más de media hora después de que comenzara el ataque.
Un testigo que presenció los hechos dijo a TV2 que vio a una mujer tratando de esconderse mientras un hombre estaba «parado en un rincón con un carcaj con flechas y un arco en la mano». “Después, vi gente corriendo por sus vidas. Uno de ellos era una mujer que sostenía a un niño de la mano ”, dijo al canal noruego local.
El jefe de la policía local, Oeyvind Aas, confirmó que el atacante logró escapar de un enfrentamiento inicial con los oficiales antes de ser finalmente detenido a las 8:47 am hora local, 34 minutos después de que comenzara el ataque. Las autoridades creen que mató a las víctimas luego de ese primer encuentro con las fuerzas de seguridad.
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La televisión pública NRK ha informado de que el agresor ha sido condenado en varias ocasiones. El año pasado, se impuso una orden de restricción de seis meses a dos parientes cercanos después de que él amenazara con matar a uno de ellos.
La Fiscalía del país también ha informado este jueves que el detenido utilizó otras armas, además del arco y flechas, sin ofrecer más detalles. Así lo reveló a la agencia noruega NTB la fiscal instructora del caso, Ann Irén Svane Mathiassen, quien agregó que el agresor, que vivía en esa localidad, ha admitido los hechos por los que se le imputa. «Es conocido por la policía, pero prefiero no dar detalles sobre los asuntos en los que ha estado involucrado», dijo a TV2 el representante del Ministerio Público.
Según el abogado defensor del detenido, Fredik Neumann, la policía interrogó al sospechoso anoche durante más de tres horas. Su cliente, que fue trasladado a una comisaría de la ciudad de Drammen, «está cooperando y ofreciendo declaraciones detalladas sobre el hecho», dijo Neumann en declaraciones a la emisora pública NRK.
Los heridos fueron trasladados a hospitales cercanos y decenas de vehículos de emergencia como ambulancias, patrullas policiales y hasta dos helicópteros viajaron al lugar, según la prensa local.
«Los informes que llegan esta noche desde Kongsberg son aterradores», dijo la primera ministra noruega, Erna Solberg, en una conferencia de prensa el miércoles por la noche. «Entiendo que mucha gente está asustada, pero es importante enfatizar que la policía tiene el control de la situación en este momento». La policía ha ordenado de inmediato a todos sus agentes en el país que porten armas. Normalmente, la policía noruega está desarmada, aunque tiene acceso a pistolas y rifles si los necesita.
Uno de los dos heridos en el ataque es precisamente un policía fuera de servicio que se encontraba en el supermercado desde el que el atacante empezó a disparar flechas.
El ataque llega 10 años después la matanza más grande que Noruega haya visto. El 22 de julio de 2011, Anders Breivik, un neonazi antimusulmán que afirmó actuar en nombre de la lucha contra el multiculturalismo y la “invasión musulmana”, asesinó a 77 personas tras detonar una camioneta bomba frente a la sede del gobierno, que dejó ocho muertes. Más tarde, protagonizó una rodaje en Utoya, una isla cercana donde se estaba llevando a cabo una reunión de la sección juvenil del Partido Laborista. Allí asesinó a 69 adolescentes que participaron en el encuentro.
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