Banco Central asegura incremento de precios obedece a un fenómeno transitorio
El incremento en los precios de alimentos básicos y de las materias primas obedece a un fenómeno transitorio el cual, una vez haya sido rebasado, provocará que la inflación en el país se sitúe en torno al rango meta fijado por las autoridades de 4 %.
Así lo establece un análisis del Banco Central, en cual se precisa que la presión inflacionaria ya está siendo abordada con éxito por el Gobierno, a través de sus organismos competentes, con el fin de mitigar cualquier impacto en el mediano plazo, a través de planes de abastecimiento y monitoreo de precios.
“Si bien la inflación anualizada a diciembre de 2020 fue de 5.55 % y las inflaciones de enero y febrero del presente año alcanzaron 0.97 % y 0.68 %, respectivamente, es de esperarse que la inflación interanual converja a la meta del programa monetario y se sitúe en torno al 4 %, una vez hayan sido rebasados los efectos transitorios”, destaca.
Explica que las distintas medidas expansivas adoptadas por los bancos centrales del mundo, en el marco de la pandemia, han sido concebidas bajo un enfoque transitorio y anticíclico, es decir, para combatir la recesión ocasionada por la crisis sanitaria, hasta tanto se logren las condiciones económicas para las cuales fueron creadas.
“A pesar de un entorno internacional aún incierto, debido a la pandemia, las variaciones en los precios domésticos de países como el nuestro están explicadas por factores de origen externo y son de naturaleza transitoria, debiendo los precios converger hacia su nivel de equilibrio en el contexto global”, detalla el documento.
El banco señala que los aumentos en las cotizaciones de las materias primas, muchas de las cuales conforman insumos para la producción de otros rubros agropecuarios, avícolas e industriales son, fundamentalmente, a una sobre demanda de cereales y alimentos en el mercado mundial.
Agrega que este incremento en la demanda ha sido exacerbado por economías emergentes como la China, que fue la primera en recuperarse de la crisis generada por el COVID-19, provocando mayores costos y restricciones a la movilidad marítima de mercancía, dada una escasez temporal de contenedores a nivel global.
“Si bien muchos países se han beneficiado de la tendencia alcista en los precios de las materias primas, como el caso de México y Brasil con el petróleo, y de Chile con el cobre, el caso dominicano, al igual que el de otros países de Centroamérica, revela que las economías importadoras resultan severamente golpeadas por los incrementos de los precios internacionales”, detalla.