Cristiano Ronaldo ha dado un recital
Semana del principio de acuerdo. El escocs Denis Law fue en los aos 60 uno de los santones del Manchester United junto a Bobby Charlton y George Best. En el crepsculo, cuando se le trataba de usted y se bajaba del caballo con molestias en el sleo, Law aterriz en el Manchester City. La visin atormentaba a los aficionados del United que haban apodado ‘The King’ a Law.
Por una pirueta del f
tbol, a Law le esperaba un derbi decisivo. Casi sin querer, con
un taconazo de viejo catedrtico del rea, meti un gol con el que el United bajaba a Segunda
. No lo celebr, se fue a su campo con el alma en la UVI. Fue el ltimo gol de su carrera, una tortura durante el resto de sus cenas. Law fue, es y ser del United aunque ahora el alzheimer le intente borrar las ovaciones.
Las portadas y el portugus
Cristiano Ronaldo, que haba vivido un verano insoportable con Messi, Haaland y Mbapp
en todas las portadas del planeta, reaccion a tiempo para no ser el nuevo Denis Law.
El portugus ha dado un recital
de cmo entrar en el mercadeo, negarlo con una indignacin de cartn-piedra y por ltimo coger el avionazo con otro destino. Durante unas horas se le imagin a las rdenes de
Guardiola en el City
y termin en Old Trafford bajo el monculo de Charlton y Ferguson. Al menos no har un taconazo en la nuez de De Gea con la camiseta del City.
Fue el penltimo giro radical -la expresin de moda-
de un verano que se mueve como si viviese instalado en las antiguas noches de Ibiza. Es una poca en la que todo es inminente, en la que
cada seis horas sucede algo histrico
y en la que entre medias se juegan partidos de ftbol.
Los lmites de la realidad se han descosido.
Sergio Ramos va a celebrar goles con Messi
. Varane se reencuentra con Cristiano en el United. Guardiola quiere ser seleccionador de algo. El Chelsea ficha por segunda vez a Lukaku. Y Umtiti y Mariano, dos dolos para los que huyen de las mudanzas, no se mueven.
Qu camiseta quemamos?
En este
guateque
de notas, comisiones, agentes, vuelos, ofertas, clusulas y elefantes en la piscina, el aficionado est tan desorientado como divertido.
El hincha necesita ms claridad para decidir con precisin qu camiseta tiene que quemar
. As no hay quien no se precipite a la hora de hacer una barbacoa con la tela, el nombre y el nmero de la estrella infiel. Se necesita paciencia aunque sea mucho pedir. El martes se cierra el mercado, salvo un giro radical.