La Asociación Dominicana de Rehabilitación concluyó la exposición “Sin Límites”, presentada con obras de niños y jóvenes usuarios del centro, en Galería 360, donde estuvo como protagonista Sarah Hernández Quiroz, una joven de 14 años, descrita por su madre Margarita como “el ventarrón y la calma dentro de casa, la que la inspira y reta”.
Sarah, quien tiene la condición de autismo, ha demostrado que esto no define al ser humano y que pese a las diferencias es posible ser más empático y humano en la sociedad.
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A Sarah le encanta el arte, crear historias y tiene muy claro que quiere ser cineasta cuando sea adulta.
En este camino de aprendizaje la acompañan su madre y su hermana Rommy, quienes claras de la realidad entienden que Dios tiene un plan muy especial para ella.
La exposición realizada en el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, formó parte del cierre de un programa artístico donde participaron semanalmente 74 estudiantes en el proceso de habilitación del Programa de Educación Especial y los jóvenes de Formación Laboral de Rehabilitación.
