Panorama del país. El comentarista de Panorama de la Mañana, Alfredo de la Cruz, criticó este martes las últimas tres licitaciones históricas multimillonarias para cédulas de identidad, tránsito y pasaportes por un valor de más de 10 mil millones de pesos.
«Hay que aclarar si aquellas empresas que cooperan con el Registro Civil haitiano, cédulas de identidad, licencias o pasaportes, si tienen involucramiento aquí, no pueden operar y pueden quedarse en Haití. Llegaremos al fondo. Estoy buscando…», subrayó, sin ignorar las denuncias de la Alianza Dominicana Contra la Corrupción (Adocco) y otros periodistas y medios de comunicación.
Sobre todo esto, de la Cruz reveló que la empresa que licita para imprimir cédulas dominicanas tiene actualmente un contrato con Haití para emitir 6.000 cédulas de identidad en 2025. Sin embargo, destacó que la Comisión Central Electoral (JCE), organismo responsable del registro civil y la gestión de equipos, es responsable de todo el mecanismo, pero alrededor de todo, hay un consorcio que mueve los hilos. oro.
«Esto no puede ser por las cuestiones históricas que rodean las relaciones dominicanas con Haití, que son muy específicas y aún subyacentes. Algunas cosas son sensibles entre un país y otro por razones históricas. Es imposible que una organización con sede en Haití, procesando datos de Haití, procese datos de República Dominicana», advirtió.
Para ello, un panel de comentaristas ha estado siguiendo de cerca la evolución de estos procesos de adquisiciones y contrataciones, licitaciones o concursos durante las últimas semanas, con el objetivo de profundizar en el funcionamiento interno de estos procesos para garantizar la transparencia de la financiación pública.
«Las empresas que operan en Haití y procesan datos no pueden operar en la República Dominicana. La persona en posesión de los datos del pasaporte y la empresa que dirige tampoco pueden operar en Haití, teniendo siempre la intención de fusionarse con República Dominicana y solucionar los problemas allí”, lamentó el integrante del grupo.
Se dice que el tráfico de influencias o el clientelismo han beneficiado a una empresa al ganar dos licitaciones, es decir, a los ojos de los periodistas, un acto de mala fe o un acto de alteración de los procedimientos burocráticos y del cumplimiento de la ley para hacer visibles posibles compromisos, lo que ha desencadenado una nueva ola de corrupción.
«Aquí todo el mundo sabe que los documentos de identidad y los pasaportes son falsos y que la gente se va al extranjero. Hay mucha gente aquí con una mentalidad fanática y mafiosa. La mayoría de los cruces fronterizos son coludidos por dominicanos que buscan entre dos mil y cinco mil pesos», dijo.
El panorama recordó que no se podía olvidar cómo se organizó la licitación millonaria «de manera muy dudosa, y una empresa santiaguera ahora se convirtió en la Reina Midas, ganándolo todo y siendo dueña de todo».
“Carlos Pimentel se negó a aceptar y escuchar lo que se informaba”, admitió el periodista. De la Cruz y Erwin Castillo creen que las acciones de Pimentel legitimaron un proceso cuyas fuentes y medios eran cuestionables.
