La Quedada del año, esa cita con lo mejor del humor en Canarias, se está convirtiendo en un imprescindible dentro del calendario tinerfeño. El Pabellón Santiago Martín, más habituado a citas deportivas, se ha convertido también el espacio natural de este encuentro que nació con la idea de que fuera «una reunión de amigos, de colegas», según explicó este domingo día 4 de mayo Darío López, maestro de ceremonias y uno de los ideólogos de este proyecto, que arrancó el año pasado con su primera edición.
Los protagonistas
Este 2025, el espectáculo coordinado por el de Palante Producciones contó con una alineación de lujo: siete de las voces más conocidas de la comedia en las Islas. La convocatoria agotó las entradas antes incluso de que se conociera quiénes serían sus protagonistas. Tinerfeños de todas las edades confiaron en un plantel formado por Abián Díaz (Tenerife), Arístides Moreno (Gran Canaria), Delia Santana (Gran Canaria), Ignatius Farray (Tenerife), Kike Pérez (Lanzarote), Petite Lorena (La Palma) y Víctor Lemes (Gran Canaria).
Humoristas que participaron en el programa. / Andrés Gutiérrez
Desde una hora antes del arranque de a velada, en torno a las 17:00 horas, el público comenzó a ocupar sus puestos –ya fuera en la grada o en las sillas dispuestas sobre la cancha que tantas alegrías da habitualmente a los aficionados del Club Baloncesto Canarias–.
Durante esa espera, demostraron sus ganas de fiesta acompañando la música con palmas o aprovechando para refrescarse con una caña o comprar unas cotufas en algunas de las barras habilitadas. Tampoco faltó a la cita la mascota del Canarias, Auri, que animó a los presentes como si de un partido se tratara.
Entrada deportiva
La entrada de los humoristas a la cancha despertó el aplauso de los presentes. Como si de una velada de boxeo se tratara, estos púgiles canarios de las risas fueron accediendo uno por uno por el túnel de vestuarios.
Desde la megafonía anunciaron el arranque. «Prepárense para disfrutar de un evento de humor, música y sorpresas. ¿Estamos preparados?». Con esa frase y una cuenta regresiva, comenzó la velada.
El primero en acceder fue «el trovador de las sonrisas», Arístides Moreno. Le siguió «la chispa de la vida», Delia Santana y el tinerfeño Ignatius, uno de los más aplaudidos. El desfile continuó con «una pequeña gran estrella de la comedia», Petite Lorena, y «recién llegado de una gira por Latinoamérica con su Chirichota», Víctor Lemes. Finalmente, el pabellón casi se vino abajo con la entrada triunfal del conejero Kike Pérez y Darío López.
El público asistió al pabellón Ragna. / Andrés Gutiérrez
Darío, maestro de ceremonias
Poco más hizo falta para que el público entrara en calor. «No hace falta nada más, gracias por estar a este público inteligente y conocedor», dijo López para dar la bienvenida. «Esto va de pasar un rato guapo y de alguna sorpresa». La primera de ellas fue para dos amigas que se tuvieron que sentar separadas porque no quedaban entradas juntas a las que López les reservó un asiento en primera fila y en un cómodo sofá.
Invitados famosos
También presentó a algunos de los invitados ilustres de la noche, ese «tipo de amigos que, después de mucho tiempo trabajando, consiguen sus reconocimientos y tú te sientes igual de feliz por ellos como si el logro fuera tuyo». Desde las gradas saludaron algunos de esos «amigos» como el chef Seve Díaz, la cantante Mel Ömana, o el galardonado cineasta garachiquense David Baute.
Con diez minutos de intervención cada uno, los turnos arrancaron con Kike Pérez «ese peso pesado del humor, aunque cada vez menos», que bromeó con su reciente diagnóstico de TDAH y con que después de empezar a trabajar con 25 años se niega a modernizarse para adaptarse a su público más joven «mi gente está en el facebook niño, no en TikTok».
Le siguió Santana, que prometió no volver a cometer el error del año pasado, cuando dijo «un par de cosas fuera de lugar». Aseguró que el problema es que sufre de «pensamientos intrusivos».
Día de la Madre
También hubo un guiño para las madres «esas mujeres empeñadas en que te bebieras el jugo de naranja rapidito para que no perdiera las vitaminas» y Darío le dedicó a ellas la velada. Por el escenario fueron desfilando sucesivamente todos los protagonistas del encuentro, que hicieron las delicias de los presentes.
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