La poeta Natalia Sosa Ayala, de orilla grancanaria y corazón apátrida, «éxodo y llegada» en el desván de su tristeza, escribió en su poemario Muchacha sin nombre (1980) que «mi nombre sólo es bruma entristecida / y nadie lo pronuncia, por extraño; / ni siquiera otro amor lo ha cobijado / en la terrible hora de tu olvido».
Pero su nombre vuelve a emerger en su isla natal, tras protagonizar el Día de las Letras Canarias 2021, sobre la huella de un amor que abrigó un deseo transcrito en cartas con motivo del rodaje de Tal vez, el primer largometraje de la cineasta grancanaria Arima León.
El pasado 24 de marzo arrancó la filmación de este proyecto, fraguado a lo largo de siete años, que ilumina la relación artística y platónica entre la escritora, nombre destacado de las letras isleñas del pasado siglo, y Pinito del Oro, la célebre trapecista que rubricó un capítulo propio en la historia de las artes escénicas de España. Las actrices Tania Santana y Adriana Ugarte, rostros de la serie Hierro o de la película Palmeras en la nieve, respectivamente, encarnan a Natalia y Pinito en esta trama que cabalga entre la realidad y la ensoñación para fabular sobre un amor imposible, y cuyo reparto completan Antonia San Juan, como Peregrina, madre de Natalia; Luifer Rodríguez, como el gran poeta Juan Sosa, padre de la escritora; Salva Reina, reciente ganador del Goya, como el emigrante Manuel; o Maykol Hernández, como el escultor Plácido Fleitas.
Y es que la historia de desamor entre estas dos figuras imprescindibles del relato cultural de la Canarias del siglo XX se enmarca en una atmósfera artística en la que desfilaron nombres como Pepe Dámaso, Mary Sánchez, Orlando Hernández o Yolanda Graziani.
«Me entrevisté con muchos amigos y familiares de Natalia, así como con artistas como Pepe Dámaso y Yolanda Graziani, que las conocieron a ambas», relata Arima León
«La cimentación de la historia es real en cuanto a que sucedió que Natalia acompañó a Pinito como secretaria durante su última gira en el Circo Price en 1986, y a que en las cartas que publicó en 1996 explicaba todos sus sentimientos de amor por Pinito», relata Arima León. «A partir de estos dos puntos, me entrevisté con muchos amigos y familiares de Natalia, así como con artistas como Pepe Dámaso y Yolanda Graziani, que las conocieron a ambas, para construir una línea narrativa que favoreciese la comprensión de la historia y poder contarla en forma de largometraje», añade la cineasta en un descanso del rodaje, en una suntuosa casa de Ciudad Jardín diseñada por Miguel Martín-Fernández de la Torre, «una casa muy mágica y especial, que nos ha dado mucho juego para poder contar la historia de Natalia con mucha luz y, a la vez, mucha tristeza, como la que revelaba en su literatura».
A la derecha, Arima León está en la escena «Quizás». / E. D.
Un rodaje de ocho semanas íntegramente en localizaciones de Gran Canaria
Con la canaria Inefable Productions en la producción ejecutiva, capitaneada por Lydia Palencia, Eric Ceballos, Daute Campos y Yádira Álvalos, Tal vez se rodará a lo largo de ocho semanas íntegramente en localizaciones de Gran Canaria, como Ciudad Jardín, Triana, Vegueta, Las Canteras, Agaete y Teror.
«La pareja protagonista ha combinado a la perfección, nos han dado momentos muy mágicos», apunta Arima León
Para la realizadora, la configuración del reparto constituye una de las fortalezas de la película. «Tenemos un casting increíble que está haciendo mucha piña y la pareja protagonista ha combinado a la perfección, nos han dado momentos muy mágicos», revela. «Adriana Ugarte se incorporó hace unos meses al proyecto [en sustitución de Marta Viera] Y, aunque tengo reservas sobre alguien fuera de las Islas Canarias que interpreta a Pinito, ella aborda el papel del mayor respeto y admiración, que es un proceso muy hermoso. Los acentos canadienses tienen muchos efectos».
Después de un largo periplo de gestación de siete años pasando por mercados y foros festivaleros, León admite que «el proceso creativo de la película ha sido completamente de altibajos». «Yo nunca he estudiado cine así que este proyecto ha supuesto para mí la academia que siempre me faltó y he ido aprendiendo cómo funciona la industria y el hecho creativo en el cine a medida que ha avanzado el tiempo».
Adriana Ugarte en una escena dorada de Pinito. / E. D.
El próximo desafío al que se enfrenta el equipo se sitúa en las escenas circenses protagonizadas por Pinito. «No solo es un reto por la peripecia acrobática, que es de por sí bastante complicada, sino por el hecho de tener que montar un circo completo desde el punto de vista del Diseño de producción y arte. Pero lo afrontamos con mucha ilusión, porque además tenemos un equipo humano increíble para poder llevarlo a cabo».
Con todo, la cineasta, que compite este mes en la sección oficial de cortometrajes del Festival de Cine de Las Palmas de Gran Canaria con su obra Koyas, manifiesta que lo más hermoso del proyecto de Tal vez radica en la posibilidad de reconstruir la memoria olvidada de dos mujeres destacadas de la historia creativa de las Islas, aún a la sombra del canon androcéntrico que pesa en el imaginario colectivo. «Para mí es una necesidad creativa poder aportar algo con mi visión y ese es mi motor para contar esta historia», expone León. «Me parece una oportunidad absoluta para darles el lugar que merecen en la Historia, para despertar el interés por su historia y también para reivindicar la cultura canaria desde otro lugar al que estamos acostumbrados», concluye.