Presidente de los Estados Unidos, Donald Trumpla orden ejecutiva firmada ayer tiene como objetivo aumentar la explotación nacional de minerales críticos y tierras raras, un sector clave en el que China tiene casi todas las áreas de desarrollo tecnológico.
«He firmado una orden ejecutiva para aumentar significativamente la producción de minerales críticos y tierras raras», anunció Trump en un evento celebrado en la Casa Blanca.
Puedes leer: Guerra ucraniana: Moscú y Kyiv anuncian ataques de drones a gran escala
La orden le permite a Trump invocar poderes de emergencia para promover la explotación nacional de estos materiales y reducir su dependencia de los terceros países. Específicamente, Trump recurrió a la Ley de Producción de Defensa, una legislación contra la Guerra de Corea (1950-1953), que permitió al presidente movilizar fondos y otorgar fondos al sector privado para mejorar la producción nacional en el sector de seguridad del país.
Según el texto, la Orden Ejecutiva tiene dos objetivos principales: facilitar la concesión de licencias para permitir el uso de los tipos de financiamiento de propiedad de los Estados Unidos y otros tipos a empresas que participan en estos proyectos.
La medida trata las preocupaciones, incluida la UE, y sus aliados, con un control casi absoluto sobre ella Porcelana En este campo. Las tierras raras y los minerales clave, incluidos el litio, el cobalto, el grafito y el níquel, juegan un papel clave en la fabricación de una variedad de productos, desde semiconductores en sistemas de defensa hasta paneles solares o baterías de vehículos eléctricos.
China tiene casi monopolio en la explotación y la refinación del sector de tierras raras, ya que estos minerales de otros países son incluso cruciales para tratarlos en su territorio, un proceso altamente contaminante que muchos países evitan debido a los impactos ambientales.