El cineasta canario Alberto Gross Molo ha triunfado esta semana en el Festival Internacional de Cine de Berlín –la Berlinale– con el proyecto de su primera película, Catorce de marzo.
Concretamente, se ha hecho con el VFF Talent Highlight Award, dotado con 10.000 euros. Esta distinción se otorga al proyecto más prometedor de cuantos participan en el Talent Project Market, organizado por la Berlinale Co-Production Market en colaboración con Berlinale Talents. Este año el ganador fue el proyecto del grancanario, que fue presentado por la productora Laura Egidos Plaja (Contraria Media, España). Los premios de nominación, dotados con 1.000 euros, fueron para la productora Alice Bloch (Marianne Productions) de Francia y la productora Julia Alves (Quarta-feira Filmes) de Brasil.
Este proyecto, que ha pasado por La Incubadora de la ECAM, cuenta con la producción de Contraria Media, Solita Films y Ayhe Productions. Surtsey Films, adelantan, será su distribuidora en España.
«Yo soy de Las Palmas de Gran Canaria y a los 18 años me fui a estudiar a Barcelona, a la Escuela de Cinematografía de Cataluña, la CAC», recordó este viernes el autor del guion y director de una cinta que, si todo sale según sus planes, empezarán a rodar a principios del año que viene.
Hasta ahora, Catorce de marzo ha cubierto aproximadamente el 70 por ciento de la financiación necesaria para que la cinta sea una realidad. «Al menos de la parte española. Confirmada tenemos la del ICAA y la de la Televisión Canaria, más los incentivos fiscales», precisó. El equipo espera también las resoluciones de las subvenciones tanto de Televisión Española como de la TV3.
Catorce de marzo es un guion de Gross, que también es el director, y de su colaborador Tomás Bayo. La cinta partirá, según sus propias palabras, de la historia «de un niño de 12 años, Héctor, junto con su hermana pequeña, Gema, que tiene unos seis años. Juntos se enfrentan a las 24 horas antes del juicio de divorcio de sus padres». La trama aborda cómo los pequeños tendrán que hablar con el juez «por separado y decidir con quién prefieren vivir, si con su madre o con su padre».
De Berlín, además de con esta distinción, el equipo que rodea a Gross ha regresado con muy buenas perspectivas a la hora de conseguir un socio internacional que complete un presupuesto de cerca de dos millones de euros. «Debemos pensar que se trata de una película protagonizada por niños y con ellos solo podemos trabajar unas cinco horas al día, lo que alarga considerablemente el rodaje y, con ello, aumenta el presupuesto».
La cinta del grancanario ha llamado especialmente la atención en dos países, Francia y Alemania. «Buscan este cine con mirada autoral pero muy abierto, donde el público pueda disfrutar, reírse y llorar», explicó.
Gross celebró el hecho de que el Gobierno de Canarias se haya decidido a apoyar la redacción de guiones de autoría local, una noticia que avanzó este jueves la consejera de Universidades, Ciencia e Innovación y Cultura, Migdalia Machín. Este 2025 será el primero en el que el Ejecutivo regional consignará un paquete de ayudas destinadas a promover la redacción de historias audiovisuales.