¿Por qué tenemos sueños eróticos mientras dormimos?
Los sueños son comunes a todos los seres humanos, y también los sueños eróticos, pues la sexualidad forma parte de nuestra vida.
En la fase del sueño en la que aparecen historias o fantasías se denomina fase REM y sus causas pueden ser bastante complejas, tanto como los sueños.
El porqué de los sueños eróticos
Según las teorías de Sigmund Freud, los sueños eróticos pueden tener varias interpretaciones. La más simple es que la sexualidad es algo normal en la vida, pero también pueden significar un deseo sexual frustrado.
En ocasiones los sueños eróticos aparecen en un momento en que el individuo no ha tenido sexo durante un tiempo prolongado y el porqué de ellos es entonces la necesidad de buscar un desahogo. Puede suceder incluso que una persona tenga orgasmos en los sueños.
Cada persona vive sus sueños de una forma diferente y lo mismo sucede con los sueños donde el erotismo aparece de variadas formas. Para unas personas son sueños agradables, mientras que para otros son desagradables, pues les hace sentirse culpables y en algunos casos, infieles.
Pero es importante tener en cuenta que si tenemos sueños eróticos con una persona no necesariamente eso signifique que sintamos atracción sexual hacia ella. Los expertos afirman que no hay que tomar los sueños al pie de la letra y que estos no necesariamente muestran deseos que se quieran hacer realidad.
En innumerables ocasiones este tipo de sueños significa que hay conflictos que no han sido resueltos. El componente sexual aparece en el sueño como podría aparecer cualquier otro, pues los sueños forman parte del inconsciente, no tienen una lógica y no se rigen por las reglas de la realidad.
No existe una interpretación aplicable a todos los sueños eróticos y a todas las personas, pues desentrañar el porqué el individuo tiene determinados sueños es en la mayoría de los casos un proceso extremadamente complejo.
Los expertos opinan que tener un sueño erótico es bueno, pues permite liberar esa tensión sexual acumulada. Puede ir acompañados de excitación y también de orgasmo en ambos sexos, aunque esto es más frecuente en los hombres.
Un ejemplo es la eyaculación involuntaria durante la noche, que frecuentemente se relaciona con un sueño erótico, especialmente en adolescentes, pero también puede aparecer en hombres de todas las edades.
Los sueños eróticos y el orgasmo nocturno confirman que la estimulación física no es completamente necesaria para el placer, sino que es el cerebro el principal órgano sexual.