Los iceberg son de colores: ¿Por qué?
Cuando se habla de fenómenos naturales, muchas veces se destacan a los icebergs, especialmente por sus formas y colores. A diferencia de lo que muchos pueden pensar, no son de un tono blanco inmaculado sino que los icebergs son de colores distintos, presentando una belleza sin igual que ha sido estudiada por muchos científicos.
Muchos de éstos son de un color azulado intenso, y esto se explica, entre otras razones, porque el color se forma cuando el agua llena las grietas de icebergs y se congelan sin llegar a formar burbujas. Todo ello da las diferentes tonalidades que lo hacen un fenómeno único.
Mientras que el verde es porque hay una enorme concentración de algas que están en el interior del hielo durante su formación. Pero hay más teorías que explican que tales bloques de hielo tengan diversas tonalidades. Pues otros científicos creen que las trazas azuladas suelen ser frecuentes en las aguas antárticas. Mientras que los verdes y marrones podrían darse por sedimentos de otras criaturas marinas que quedan atrapadas en el hielo del iceberg.
En cualquier caso es un fenómeno algo extraño, pero hermoso que la naturaleza nos proporciona y que da lugar a fotografías cargadas de magia.
Otras teorías están relacionadas con la luz. Stephen Warren, de Universidad de Washington, a la revista Scientific American, explicó que el color viene determinado por la forma en la que interactúan con la luz. De esta manera, la luz rebota de forma distinta, según sea el hielo, más o menos grueso, por su composición… y esto es lo que hace el iceberg filtre las ondas de la luz viéndolos de uno u otro color.
El color azul, que suele predominar en la mayor parte de los icebergs, puede variar según su composición, y si el hielo lo forma agua de mar libre de partículas, el azul puede ser más brillante e intenso, pudiendo cambiar, incluso de tono.
Por otro lado, las células muertas o el polvo de roca con hierro provocan que el hielo se vea amarillo. En cualquier caso, todo ello da lugar a un gran espectáculo de luces y colores, que parece algo artificial, y sin embargo, no lo es.