Las emergencias de tres hospitales estuvieron llenas de heridos

Las emergencias de tres hospitales estuvieron llenas de heridos


Las emergencias de los hospitales lucieron llenas de pacientes el día de Año Nuevo.

Los hospitales fueron el escenario perfecto para evidenciar los excesos en el consumo de alcohol, en combinación con el desplazamiento a alta velocidad en motocicletas y vehículos de motor durante la noche del 31 de diciembre y el día 1 de enero, durante las festividades de Año Nuevo.

Los heridos por armas blancas, intoxicados por alcohol y accidentados se contaban por docenas en las emergencias de los hospitales Francisco Moscoso Puello y los traumatológicos Darío Contreras y Ney Arias Lora, en donde las unidades del Sistema de Emergencia del 9-1-1 no paraban de llevar pacientes politraumatizados, en su mayoría en estado de ebriedad.

Aunque hasta el mediodía de ayer no se disponían de estadísticas exactas, las cuales serán ofrecidas este miércoles por el Centro de Operaciones de Emergencias (COE), elCaribe supo de manera extraoficial que en el hospital Darío Contreras fallecieron dos personas en la madrugada de ayer. Se trata de Jeimi Alexander Nolasco, de 20 años de edad, quien murió en la emergencia del citado centro de salud luego de ser baleado en el costado derecho en un hecho ocurrido en el sector de Villa Francisca, y Bernardino León Peña, de 37 años, quien falleció mientras era trasladado al hospital por una unidad del 9-1-1, que lo recogió en estado agónico en la avenida George Washington.

En los pasillos se observaban a decenas de personas con heridas en la cabeza, brazos y piernas, mientras el personal asistencial trabajaba a toda capacidad.

El Ney Arias abarrotado de pacientes

La situación era bastante parecida en el Hospital Ney Arias Lora, en la avenida Charles de Gaulle, cuya área de emergencia lucía abarrotada, así como su explanada frontal, donde varias personas se encontraban a la espera de noticias de sus familiares.

El doctor Alfredo Polanco, subdirector de este centro, afirmó que el incremento de pacientes se produjo a partir de las 7:00 de la noche del 31 de diciembre, básicamente de accidentados en motocicletas que no utilizaban casco protector y heridos en riñas, en su mayoría con notable ingesta de alcohol. Previendo la situación, dijo que la emergencia fue reforzada y contaba con 40 médicos, entre ortopedas, cirujanos y neurocirujanos y voluntarios.

Entre los pacientes se encontraba un joven de unos 17 años, quien supuestamente sostuvo una pelea en un centro de expendio de bebidas y resultó herido con una botella, que prácticamente le destrozó uno de sus ojos, y según los pronósticos médicos es casi seguro que pierda la visión.

Hospital Moscoso Puello

Mientras que, en el hospital Moscoso Puello, la situación estaba más calmada cerca del mediodía. La emergencióloga Ana Paniagua, informó que solo el 31 de diciembre se atendieron 24 pacientes heridos en accidentes de tránsito, trece por agresión física, 18 por intoxicaciones etílicas y dos por sufrir heridas con arma de fuego.

Sobre estos dos últimos casos dijo que uno resulto herido en una riña y el otro corresponde a un hombre de 53 años quien resultó herido en la zona anterior del cuello por una bala perdida mientras dormía en su casa en el barrio Capotillo.

Antes de llegar al mediodía de ayer ya habían recibido quince heridos a bordo de unidades del 9-1-1.

Joven salva la vida en un aparatoso accidente

Un joven de 30 años quedó vivo de milagro luego que el vehículo en que viajaba quedara prácticamente destrozado tras chocar con un poste del tendido eléctrico mientras se desplazaba por la avenida Charles de Gaulle, en las proximidades del hospital Ney Arias Lora. Visiblemente conmocionado, Juan José Fernández narró que regresaba de dejar unos familiares en una parada de autobuses pero se durmió mientras conducía.