Productores de café dominicanos han perdido más de RD$18,000 MM en últimos 5 años

SANTO DOMINGO. Los productores dominicanos de café han perdido en los últimos años más de 18,600 millones de pesos producto de los efectos de la roya (Hemileia Vastatrix) en las plantaciones del país y por la falta de apoyo del Gobierno Central.

“Antes del brote de la roya, que empezó en el 2013, la última producción anual que hubo aquí, cosecha 2011-2012, fue de 740,000 quintales, esa fue la cosecha de ese año cafetero, y dos años después solo se produjeron 110,000 quintales de café, una caída abrupta a nivel nacional. La razón de eso fue la falta de atención del Gobierno a la emergencia fitosanitaria que implicó ese nuevo brote de la enfermedad”, expresó Richard Peralta, productor de café y director ejecutivo del Consejo Regulador del Café de Valdesia, compuesta por San José de Ocoa, Peravia y San Cristóbal.

Explicó que la roya del cafeto es una enfermedad vieja en el país, que se detectó por primera vez en el año 1988 y de allá para acá ha habido varios brotes. Sostuvo que en la época del expresidente Joaquín Balaguer y gobiernos posteriores, se articulaban programas de la enfermedad, de controles químicos, donde con brigadas se visitaban los campos para la aplicación del fungicida.

“Eso fue lo que precisamente no se hizo en esta ocasión, el Gobierno se dejó llevar de la tesis de que lo que había que hacer era cambiar las variedades, resulta que para cambiar 1,600,000 tareas, que había para el 2012, se necesitaba una inversión de 30,000 millones de pesos y es evidente que esa suma es muy cuantiosa para el Gobierno asumirla. Lo que mandaba el protocolo técnico del manejo de la enfermedad era, obviamente, aplicar el control químico los dos años consecutivos, que era lo que se había hecho en las otras ocasiones. Esos programas costaban 300 millones para la aplicación del fungicida”, expresó.

Dijo que producto de ese “desastre” que se produjo por la enfermedad, hoy en día se desconocen cuántas tareas hay sembradas y cuántos productores hay en el país.

“Ahora mismo después que el “desastre” ocurrido a los productores solo les queda un solo camino, el camino es un gran plan de renovación de cafetales, que es sustituir una plantación diezmada, acabada y que ya no tiene capacidad productiva”, planteó.