La próxima revolución del consumo

Chocolates, helados, champú, desodorantes… Estos y muchos productos que ahora se compran en las tiendas y supermercados en envases o envoltorios que después se tiran a la basura, se comercializarán en elegantes recipientes especiales de larga duración, que se reutilizarán, reduciendo los desperdicios a cero.

Este mismo año, los consumidores de algunas ciudades estadounidenses y europeas podrán adquirir diversos comestibles y elementos de higiene y uso habitual de marcas habituales, utilizando este sistema llamado “Loop” (bucle o lazo), desarrollado por una coalición de los mayores fabricantes de productos de consumo del mundo y la firma especializada en reciclaje TerraCycle.

“Lanzaremos las primeras experiencias piloto de la plataforma en París (Francia) y las ciudades estadounidenses de Nueva York, Nueva Jersey y Pennsylvania en mayo de 2019, y planificamos comenzar a operar en el Reino Unido a finales del tercer trimestre”, adelanta a Efe Lauren Taylor, vicepresidente global de creatividad y comunicaciones de TerraCycle.

Taylor vaticina que los consumidores no tardarán mucho tiempo en adaptarse a este nuevo sistema, dado que Loop se está integrando dentro de las redes de comercios minoristas más grandes del mundo, y todo lo que tendrá que hacer el consumidor es cambiar de un envase desechable a uno duradero.

Este experto explica a Efe que los consumidores irán a los sitios web de Loop, (www.loopstore.com o bien www.maboutiqueloop.fr), o a las webs de los minoristas asociados a esta plataforma y comprarán los productos de sus marcas de confianza, que ahora han sido rediseñados para que ser envasados sin generar residuos.

“El consumidor recibirá sus pedidos en una bolsa-contenedor semirrígida, plegable y desplegable, eliminando la necesidad de materiales de embalaje de un solo uso, como las cajas de cartón, y los disfrutará experimentando la elegancia y comodidad de los envases reutilizables sin el desperdicio de los desechables”, apunta.

“A medida que el consumidor termina sus productos, irá colocando el envase vacío en la misma bolsa-contenedor en la que los recibió directamente en su propia casa, desde donde también será recogida”, explica Taylor.

Los envases, a continuación, serán limpiados mediante tecnologías específicas para cada producto de modo que puedan reutilizarse de manera segura y rellenarse rápidamente, para devolverlos, de nuevo, al consumidor en los contenedores de envío.

Algunos contenidos o productos usados, como los pañales, almohadillas, maquinillas de afeitar o partes de los cepillos dentales, se recuperarán para ser reutilizados o reciclados, según Taylor.

“Este sistema producirá beneficios tales como una espectacular actualización en los materiales y diseños de los productos, cuyos nuevos envases podrán incorporar características como, por ejemplo, mantener un helado congelado, o conseguir que las toallitas húmedas durante más tiempo, todo ello sin que el usuario genere desechos”, explica a Efe.

El objetivo es ofrecer una opción con “desperdicio cero” para los productos de consumo más populares del mundo, manteniendo su asequibilidad, mejorando su comodidad y devolviendo los artículos usados a un ciclo de vida circular, ya sea a través de la reutilización o el reciclaje, señalan desde Loop.

“Este sistema no solo eliminará la actual idea de los residuos de envases, sino que mejorará la experiencia de usar el producto y la forma en que compramos”, vaticina Tom Szaky, director ejecutivo (CEO) de TerraCycle.

“Loop permitirá consumir de una forma más responsable y con beneficios para el medioambiente una serie de productos en envases duraderos, reutilizables o totalmente reciclables, diseñados especialmente y fabricados con materiales como aleaciones, vidrio y plásticos de ingeniería”, señala.

“Aunque el reciclaje es de una importancia crítica, no va a resolver la causa raíz de los residuos, que para nosotros consiste en que las cosas se estén usando una única vez. Eso es realmente lo que Loop intenta cambiar”, señala Szaky a la revista de tendencias ‘Fast Company’, que augura que este sistema cambiará para siempre la forma en que compramos.

Por Daniel Galilea