Candidato a dirigir el Banco Central de Brasil pide autonomía del organismo

El economista Roberto Campos Neto, quien ha sido propuesto como presidente del Banco Central de Brasil, se mostró favorable este martes a diversos proyectos que tramitan en el Congreso y proponen dotar de plena autonomía a esa institución.

Campos Neto compareció ante una comisión del Senado, cuyo pleno debe avalar su nombramiento, que ha sido propuesto por el presidente Jair Bolsonaro, y consideró que “Brasil está bastante maduro” como para desvincular al Banco Central del Gobierno, tal como sucede en Estados Unidos y otros países.

Su candidatura a presidir el Banco Central fue aprobada por la Comisión de Asuntos Económicos, pero aún debe pasar por el cribo del pleno del Senado, que tendrá la última palabra sobre su designación para sustituir en el cargo al economista Ilan Goldfajn.

En opinión de Campos Neto, un Banco Central autónomo tendría más credibilidad frente a los mercados, no dependería de decisiones del Ejecutivo para ajustar las políticas monetarias y gozaría de mayor libertad para promover una reducción de los tipos de interés, lo cual impulsaría tanto el crédito como el crecimiento económico.

“Si el Banco Central fuera autónomo, las decisiones de política monetaria dependerían mucho más de reglas que de personas”, declaró.

Según Campos Neto, otros de sus objetivos al frente del Banco Central son promover la inversión privada nacional y extranjera y “trabajar de forma incansable en favor de la estabilidad del poder de compra de la moneda”, así como mantener la inflación bajo el más estricto control.

Si bien sostuvo que la economía brasileña ha comenzado a dejar atrás la crisis del período 2015-2016, en que el Producto Interno Bruto (PIB) perdió siete puntos porcentuales, aseguró que “aún queda mucho trabajo por delante hasta llegar a una recuperación plena”.

Campos Neto apuntó que es necesario lograr que Brasil “recupere totalmente la confianza internacional” y sostuvo que eso sólo será posible con políticas que garanticen “una gestión transparente y profesional”, sin interferencias políticas.

Según Campos Neto, otras tareas pendientes en el Banco Central son reforzar el proceso de “modernización del sistema financiero”, que debe ser incentivado a “buscar una mayor innovación”, y promover un “mejor nivel de educación financiera” entre los brasileños, a fin de que aprovechen las oportunidades de la bolsa y otros mercados.

Hasta ser propuesto por Bolsonaro como presidente del Banco Central, Campos Neto era miembro de la junta directiva del Banco Santander en Brasil.

De perfil eminentemente técnico, es nieto del exministro Roberto Campos, uno de los planificadores del banco de fomento del país y considerado uno de los principales representantes del pensamiento liberal en Brasil.

Campos Neto también se alinea en ese mismo ideario, que es el mismo del ministro de Economía, Paulo Guedes, formado en la Escuela de Chicago, al igual que muchos de los miembros del equipo económico del Gobierno del ultraderechista Bolsonaro, que ha prometido reducir a mínimos la presencia del Estado en la actividad económica.